La lucha por la vida I: 040
none Pág. 040 de 97 La lucha por la vida I Segunda parte Pío Baroja -¡He estado en tantos sitios! -contestó, con aire de superioridad, el antiguo Hombre-boa-. Nos embarcamos en el Abre -siguió diciendo don Alonso- en un barco que se llamaba la Navarr, y estuvimos en La Habana durante unos ocho meses; trabajando allí, nos salió un negocio de una lotería, y Pérez y yo ganamos veinte mil pesos oro. -¡Veinte mil duros! -dijo Manuel. -¡Cabalito! A la semana siguiente ya los habíamos perdido, y nos encontrábamos Pérez y yo sin un centavo. Pasábamos unos días alimentándonos de guayaba y de ñame, hasta que encontramos en el muelle de La Habana unos gimnastas que estaban más arruinados que el verbo y nos reunimos a ellos. Era gente que no trabajaba mal; había acróbatas, clauns, pantomimistas, barristas y una equiyer francesa; formamos una compañía e hicimos una turné por los pueblos de la isla; pero una turné morrocotuda. ¡Cómo nos obsequiaban en...
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