La lucha por la vida III: 109
none Pág. 109 de 127 La lucha por la vida III Tercera parte Pío Baroja A la hora de costumbre, Manuel salió de casa; no había dado la vuelta a la calle de Magallanes cuando dos hombre le detuvieron. -¿Es usted Manuel Alcázar? -Servidor de usted. -Queda usted detenido. -Está bien. -Vamos a registrar su casa. ¿Quiere usted darnos permiso para hacerlo, o quiere que vengamos con auto del juez? -Lo mismo me da. -Entonces, haga el favor de decírselo así a su familia. -Bueno. Volvieron a la casa. -¡Ah!, yo exijo una cosa -dijo Manuel al entrar en el portal. -¿Qué? -Que asistan dos vecinos al registro. -Está bien. Manuel, con un agente, fue al juzgado de guardia, e inmediatamente le llevaron a presencia del juez. -Tengo entendido -le dijo el juez- que es usted un anarquista peligroso.. -¿Yo? No, señor, no soy anarquista. -Entonces, el agitador es un hermano de usted. -Mi hermano es anarquista, pero no de acción. -Su hermano es escultor, ¿verdad? -Sí,...
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