Las inquietudes de Shanti Andía: 097

23/10/2009 836 Palabras

none Pág. 097 de 156 Las inquietudes de Shanti Andía - Libro cuarto Pío Baroja Varias veces instamos al teniente a que saliéramos a dominar a los amotinados, pero él nos contenía diciendo: -No, no; que vean que nos necesitan. Si no, en seguida se volverían a sublevar otra vez. Al quinto día nos sorprendió la agitación que había en cubierta; se oían gritos furiosos, voces iracundas... Al anochecer estaba yo de guardia cuando sonaron dos golpes suaves en la puerta. -¿Quién va? -pregunté. -Soy yo, Allen. Vengo con Sam Cooper, el contramaestre, y con Tommy, que quieren hablar con el piloto. -Esperad un momento. Desperté a Tristán, que se echó de la hamacó y que ,mandó abrir inmediatamente. Por lo que contó Old Sam, portugueses y holandeses, sintiendo renacer sus odios, se batían a palos y a cuchilladas en la cubierta. Después de una lucha en que quedaron en el campo varios combatientes, los holandeses, más en número, habían hecho meterse en el...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info