Soneto a la rosa

A Jorge Rojas En el aire quedó la rosa escrita. La escribió, a tenue pulso, la mañana. Y, puesta su mejilla en la ventana de la luz, a lo azul cumple la cita. Casi perfecta y sin razón medita ensimismada en su hermosura vana; no la toca el olvido, no la afana con su pena de amor la margarita. A la Luna no más tiende los brazos de aroma y anda con secretos pasos de aroma, nada más, hacia su estrella. Existe inaccesible a quien la cante, de todas sus espinas ignorante, mientras el ruiseñor muere por ella. 20 poemas de Eduardo Carranza Soneto Insistente - Soneto a Teresa - Soneto con una salvedad - Soneto a la rosa - El olvidado - Soneto sediento - Tema de mujer y manzana - Es melancolia - Oda con una orquídea - Alhambra - Interior - El desdichado - Galope súbito - Sueño de enero - Galerón - El insomne - El poeta pregunta por su vida - Soneto sentimental - Madrugada - Epístola mortal

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información