VI. La Boda
Introducción Fernando el Católico. LA princesa, en Ocaña, en ciertos momentos lloraba de desesperación, sobre todo cuando veía que hasta los nobles que le eran más adictos intentaban lograr que aceptase el matrimonio portugués. Sus lágrimas eran espontáneas, verdaderas, y hasta femeninas, o sea reveladoras de debilidad. Pero en el alma de Isabel había también otros sentimientos que le permitían sobreponerse. Esperaba que se produjese una coyuntura favorable, por precaria que fuese, para casarse con Fernando.
Está viendo el 3% del contenido de este artículo.
Solicite el acceso a su biblioteca para poder consultar nuestros recursos electrónicos.
Ventajas de ser usuario registrado.
Acceso sin restricciones a todo el contenido de la obra.
Sólo información contrastada de prestigiosos sellos editoriales.
Contenidos de renombrados autores y actualizaciones diarias.
La nueva plataforma del Consorcio ofrece una experiencia de búsqueda de fácil manejo y de gran usabilidad. Contiene funciones únicas que permiten navegar y realizar consultas de manera ágil y dinámica.
Convenios especiales: Enseñanza Bibliotecas públicas