El ángel exterminador (película)

El filme narra la historia de un grupo de invitados, entre ellos un coronel, una cantante, un escritor y un director de orquesta, reunidos en su mansión de la calle de la Providencia por Edmundo y Lucía Nóbile, quienes organizan una fiesta para homenajear a la pianista Silvia tras haber asistido a una velada operística. Mientras los invitados llegan, los criados abandonan la casa sin una razón clara y al finalizar la fiesta ninguno de los huéspedes puede salir del salón sin saber por qué. Allí permanecen varios días, observados desde fuera por familiares, amigos, policías y transeúntes, destrozándose física y moralmente hasta que logran liberarse del misterioso maleficio. Anfitriones y huéspedes asisten a un solemne Te Deum en la catedral en acción de gracias como habían prometido si lograban liberarse del cautiverio, pero al finalizar la ceremonia ni el sacerdote ni los 200 asistentes al acto pueden salir del templo. Esta estructura circular forma parte de uno de los temas preferidos del realizador, la repetición. “Creo haber sido el primero en emplearla”, se jactaba el cineasta, que en esta película presenta un buen número de situaciones duplicadas. “La repetición me atrae, tiene un efecto hipnótico. En El ángel exterminador al menos hay unas veinte”.