El medio físico El parque forma parte de la Serralada Litoral Catalana y su potente masa pétrea se levanta desde la misma orilla del mar Mediterráneo. El sustrato geológico está dominado por la roca calcárea, que en forma de caliza y dolomía ocupa la práctica totalidad del parque excepto una estrecha franja en el extremo oriental en el que aparecen arcillas que proporcionan un característico color rojizo al terreno. La predominancia de roca caliza es la responsable de un paisaje agreste en el que los roquedos desnudos se mezclan con encajadas ramblas y barrancos por los que únicamente circula el agua tras los episodios de fuertes lluvias que suelen tener lugar durante el otoño. El resto del año, especialmente en el verano, domina un clima seco y soleado que provoca una gran escasez hídrica que se ve incrementada por la gran capacidad de la roca caliza para permitir que el agua penetre en su interior. Es precisamente esta característica, unida a la gran capacidad de erosión por disolución del carbonato que da cuerpo a la roca, la responsable de la profusión de simas, galerías y cuevas en el paisaje. El agua, en consecuencia, no circula por la superficie del terreno, sino que lo hace por el entramado de galerías y ríos subterráneos que horadan la mole caliza del parque.