Régimen político y administrativo aplicado por Felipe V de España (1700-1746) a los antiguos reinos y territorios de la Corona de Aragón, tras la Guerra de Sucesión de España (1701-1714), por el apoyo mayoritario que éstos habían concedido al pretendiente de la Casa de Habsburgo, el archiduque Carlos de Austria. Su principal característica consistió en la supresión de la autonomía política y administrativa del reino de Aragón, del principado de Cataluña, del reino de Mallorca y del reino de Valencia, que de reinos (o principados) pasaron a convertirse en provincias, con la consiguiente centralización. Aunque en principio se pensó en asimilarlos pura y simplemente a Castilla, no fue ésta la solución finalmente adoptada. Tras suprimirse el Consejo de Aragón y asimilarlo al de Castilla, en el plano fiscal, la Nueva Planta se caracterizó por un impuesto único (aunque diferente) en cada uno de los territorios (solución moderna que los hizo superiores a Castilla, con...