El uso de la terapia hormonal de sustitución mejora la calidad de vida de mujeres con síntomas postmenopaúsicos, pero merma la salud física de aquellas mujeres sin síntomas postmenopaúsicos. Una gran proporción de mujeres toma hormonas durante la menopausia para poder evitar la aparición de enfermedades como la osteoporosis o la cardiopatía isquémica. Si bien son conocidos los efectos positivos del empleo de la terapia hormonal sustitutiva, muchas mujeres dudan en la decisión del uso de este tratamiento ya que, aunque mejora la morbilidad respecto de patologías como la fractura de cadera o el infarto de miocardio, tiene efectos perjudiciales sobre la incidencia de cáncer de mama, endometrio y el tromboembolismo venoso. A pesar de estos inconvenientes, quizá es mejor asegurar una buena calidad de vida en los años restantes que alargar la vida, pero con la concurrencia de muchas enfermedades que mermen la salud. Un estudio publicado en la revista JAMA ha analizado los...