... haberse propuesto destrozarme todos los tabiques.«La casa me gusta -díjome Camila obligándome a sentarme en una silla a su lado, después que me acercó a los labios la carátula roja de su feo muñeco ...
... duración yque pasé sumido en la ansiedad y el horror; y cuando, por la mañana, traté de sentarme en la cama yreflexionar acerca de todo aquello, vi que era tan incapaz de una cosa como de otraIgnoro ...
... puerta al patio se cerró sentí de repente la esperanza de salir y nunca tener que regresar.Fui a sentarme a su lado, y me dijo: “Solicité tres días de vacaciones para ti, para poder llevarte a casa ...
... impiis non sedebo; o más claro: aborrezco la congregación de los malignos, y entre impíos no he de sentarme». Otros muchos latines hubo de soltar en el transcurso del diálogo, y explicó su erudición ...
... de espadañas y laureles, ¡cuántos días, absorto en la contemplación de mis sueños de niño, fui a sentarme en su ribera, y allí, donde los álamos me protegían con su sombra, daba rienda suelta ...
... o si me hubiese trasladado al campo. Si quiero ver gente, he de ir a la cocina a sentarme en el vertedero; sólo allí tengo a alguien delante. En cambio, cuando vivía en el callejón veía el interior ...
... . -¡Ah no creía yo en lo sublime; pero ya lo veo y lo toco. No, querido Ángel, no merezco sentarme a tu mesa. Cumple con este pobre prójimo dándole una ración de la sopa boba que repartes ...
... penitente y de los viejos Zaida y Alfajar. Pero ten la bondad de conducirme a un sitio donde pueda yo sentarme, que apenas veo, y no acierto a llevar mis pobres huesos por entre tanto pedrusco& 187 ...
... raíces, sobre aquel montón verde y fresco de yerba segada... ¿eh? ¿qué te parece? voy a sentarme un rato... Y lo hizo como lo dijo.Petra, sin atreverse a sentarse y sin querer dejar el puesto, miró ...
... mala?... Siéntate... Has hecho un esfuerzo demasiado grande al venir de casa a aquí. Yo voy a sentarme en los bancos del centro. Vete a nuestra capilla. El subdiácono había empezado a cantar ...
... coronel capuchino de Cervera. Pero tanta agitaci& 243;n agot& 243; al fin mis fuerzas, y tuve que sentarme en una gran piedra del camino, fatigada y abatida, porque a mi primera furia sustituy& 243 ...
... , pero ¡cuántas otras cosas hay que no son justas ¡Ah, si hubiese podido sentarme en el regazo de una señora y viajar en el coche Pero eso no depende de uno, o por lo menos yo no lo logré, pese ...
... , la mano sobre los Santos Evangelios, el juramento que confirmaba mi investidura, pasé a sentarme en los escaños, prestando voluble atención al rezo perezoso con que aquellos señores, mis compadres ...
... , con la que cruzaba continua y frecuente correspondencia.–¿Ve? Su señora me ha hecho sentarme con ella –dijo Agafia Mijailovna, sonriendo amistosamente a Kitty. Y en las palabras de la anciana ...
... que han tenido la dignaci& 243;n de asistir a las honras. La v& 237;spera del ceremonial no pude sentarme en diez horas seguidas, y a mi servidumbre tuve que agregar tres mujeres de las m& 225;s ama ...
... 225;s viva sent& 237;a aquella resistencia de mis piernas a llevarme adelante. Senteme para recobrar fuerzas, y al sentarme aument& 243; mi malestar. Dentro de m& 237; surg& 237;a una inclinaci& 243;n ...
... verme, ni me miró con dureza. Esto solo me dio un gran consuelo y fuerzas bastantes para atreverme a sentarme a su lado; pero no supe qué decirla. Temblaba yo como una hoja de otoño próxima a caer ...
... Montford; no pruebo nunca la cena. (Se levanta con presteza y le coge del brazo.) Pero iré a sentarme al lado de usted para vigilarle.SEÑOR MONTFORD.- Confieso que no me agrada mucho que me vigilen ...
... canso de estar de pie -exclamó Gray de repente-. Quiero salir al jardín y sentarme. Aquí el aire es asfixiante.-Tendrás que perdonarme. Cuando pinto me olvido de todo lo demás. Pero nunca habías ...
... habitación, envuelto en mi batín de casa, inclinado sobre un libro Por la noche algunas veces iba a sentarme a la cocina con Peggotty. Allí estaba en mi casa, sin miedos y riendo; ¡allí podía ...
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