... hierro, cuya presión es perpetua e incesante, D. Valentín no había sabido resistir, y había abdicado ... vive sin duda en casa de su hermano -exclamó D. Valentín. -Cumpliremos con...
... , asaltado de s& 250;bito terror, se par& 243; y dijo a su amigo: & 171;Pienso, se& 241;or D. Beltr& 225;n, que Marcela se nos habr& 225; anticipado, llegando aqu& 237; por alguna galer& 237;a subterr ...
... peligro común juntando sus fuerzas para rechazar las del enemigo. Fue Generalísimo de la armada confederada el mismo D. Juan, el qual tenia órden del Rey su hermano de seguir los consejos de Requesens ...
... a este infeliz a la raz& 243;n. & 191;Y c& 243;mo? Asisti& 233;ndole, cuid& 225;ndole, d& 225;ndole de comer cositas buenas y sabrosas, arregl& 225;ndole su ropa para que est& 233; decente y no tenga ...
... indicación de D. Buenaventura, a quien deseaba servir, el mismo alcalde de Ficóbriga Sr. D. Juan ... del lunes. La única condición que les puso D....
... per un altra ... Avans mori qu ésser esclaus d un castellá que no sab ahont te l cap. Sigo, y en la Puerta ... Carmen y Hospital. Hagamos alto, mi querido D. Serafín, en la Boquería,...
... chico muy introducido, puede llevarte a casa de Campo-Alange, y el almibarado Clemenc& 237;n (llam& 233;mosle D. Agapito) a casa de Castro-Terre& 241;o& 187;.-Ya ves -dec& 237;a Hillo cay& 233;ndosele ...
... caía en la cuenta, y tomaba por prosa la poesía.Si D. Urbano escribía así, no era por faltar al respeto ... pluma, iban de mal en peor.Fue inútil que D. Urbano inventase varias...
... ofrenda a los infelices que nos dieron socorro en las ruinas de Ar& 225;nzazu... De quien no hemos tenido noticia es del pobre D& 237;az. & 191;Qu& 233; habr& 225; sido de & 233;l? & 191;Le habr& 225 ...
... falta de dote y sobra de necesidades ficticias; eran nobles y no eran ricos, iban camino d ela ruina como D. Quijote a la cena en el castillo, sin quitar la celada. Era el de Cabranes...
... & 237;n, que le mandaba bajar a esperarle en Almadrones, y a& 241;adi& 243;: -Hoy he sabido que D. Saturnino Albu& 237;n est& 225; con los franceses. Si parece mentira... & 191;No ser& 225; equivocaci ...
... vienen las buenas uvas. ¿Es cierto?». Negó Lucila, y el cererillo le dio noticias que no la interesaban: que D. Gabino había tenido un ataque a la vista, quedándose medio ciego; que Domiciana seguía ...
... evidencia.«Sugiere» al jefe de la N.K.V.D. (nuevo nombre de la G.P.U.), que encuentre las pruebas ... Comité especial filial del N.K.V.D. y se han constituido en cada república y en...
... pena, porque no era muy de mi gusto pasar por un intrigante de mal g& 233;nero a los ojos de la dulce ni& 241;a de la condesa. Pocos d& 237;as hab& 237;an pasado despu& 233;s de la escena en la C& 225 ...
... extraordinario, cuyo retrato, debido al pincel de D. Vicente López, hemos contemplado con ... Cruz, casó Gumersindo con Isabel Cordero, hija de D. Benigno Cordero, mujer de gran...
... ;, de referencias diplom& 225;ticas y de rumores de intrigas, vino a parar en positivas promesas. & 171;Dentro de quince d& 237;as le mandar& 233; a usted mill& 243;n y medio. El mes pr& 243;ximo podr ...
... 237;, tir& 225;ndose de los pelos. Por fin, creo que se entendi& 243; con la Zah& 243;n: han hecho un cambalache, d& 225;ndole & 233;l su abanico a cambio de una colecci& 243;n de perlas. H& 225;llase ...
... 237;a dado ni recibido en lo que iba de siglo.-& 161;Traici& 243;n, traici& 243;n -grit& 243; D. Patricio agitando el palo y dando saltos, sin avanzar un paso hacia adelante ni hacia atr& 225;s.Lucas ...
... re sus lomos, y con loco estr& 233;pito repet& 237;an los circunstantes: -& 161;Viva el gran D. Pedro del Congosto, el m& 225;s valiente caballero de Espa& 241;a Las hachas de viento se encendieron ...
... Joaquín Dicenta Entre las personas que con mayor intimidad recibían en su domicilio los Urda, contábase D. Juan Crisóstomo del Valle, marqués de Pedrañera. Era hombre ya maduro, de cuarenta cumplidos ...
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