La Montálvez-Parte I: Capítulo Xde José María de Pereda Aquella noche durmió Verónica bastante mal, porque le dio mucho en que entretenerse el recuerdo de su conversación con Sagrario. Aunque ésta la ...
LAS COCINAS DEL ESTE: ALSACIA, LORENA Y LA CHAMPAÑAFinalizamos esta apresurada visión panorámica de la cocina regional francesa con Alsacia y Lorena, donde la base de la gastronomía es el cerdo, ...
Los cuatro jinetes del Apocalipsisde Vicente Blasco Ibáñez Primera ParteIV - El primo de BerlínEl estudio de Julio Desnoyers ocupaba el & 250;ltimo piso sobre la calle. El ascensor y la escalera ...
Los doctores visitaban la sala por la mañana.A cosa de las once aparecían todos juntos, acompañando al médico en jefe. Hora y media antes el nuestro hacía su visita reglamentaria. Era muy joven, ...
Napoleón en Chamartín& 160;: 7de Benito Pérez Galdós -No ha sido una simpleza de este buen religioso lo que te ha tra& 237;do aqu& 237; -me dijo severamente-; esto ha sido obra de tu astucia y ...
No pudo la muerte vencerme.Batallé y viví. El cuerpoInfatigable contra el alma,Al blanco vuelo del día.En las ruinas de Troya escribí:“Todo es muerte o amor”,Y desde entonces no tuveDescanso. Dije en ...
Heinrich Böll & 91;1& 93;Para Klaus Staeck, quien sabe que este cuentoes ficticio de principio a fin, pero al mismotiempo completamente real.Por la noche, ya en piyama, se sentó a la orilla de la ...
Los ingredientes especificados al comienzo de cada una de las recetas de este volumen, han sido calculados para cuatro personas. En unos pocos casos, sin embargo, las cantidades señaladas resultarán ...
Poemas en prosaEl discípulode Oscar Wilde Cuando Narciso murió, el río de sus delicias se transformó de una copa de agua dulce en una copa de lágrimas saladas, y las Oréades vinieron llorando por los ...
Acto Primero& 160;05Pág. 05 de 108San Isidro labrador de Madrid Acto ILope de Vega(Vanse, y salen DOÑA INÉS DE CASTILLA, mujer de JUAN DE VARGAS, con dos criados.)& 160;& 160;& 160;Doña Inés de ...
Abanicos de plátanos que se abren en la nochelas bordas del cielo con las calabazas del Amazonas y el olor de los jíbarosfértiles cabelleras que devoran los hombros de servidoras salvajes como ...
Llegaron un sábado por la mañana. Una mujer les abrió la puerta. Entraron uno tras de otro, sacándose el sombrero de la cabeza y volviéndoselo a poner luego. La mujer cerró la puerta; ahogó la luz ...
A los pies de Venusde Vicente Blasco Ibáñez Primera Parte& 160;: EL ULTIMO CRUZADOIIDONDE EL CANÓNIGO PIQUERAS CUENTALA GRAN EMPRESA DE SU VIDAClaudio vio a don Baltasar casi lo mismo que cuando & 233 ...
... : I -II -III -IV -V -VI -VII Ángel Guerra (Primera parte) - Ángel Guerra (Segunda parte)ISBN 978-84-9963-008-3
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