... y sanguinaria espada atravesó su hirviente y sangriento pecho, y Tisbe, oculta en la sombra de los matorrales, sacó su puñal y murió. Ahora discurran largamente el león, la luz de la luna, el muro ...
... el horror de La condena (el lector queda invitado a leerlo y a juzgar por sí mismo) y no se sabe de dónde sacó energía para iniciar una novela: El proceso. He aquí la primera página:«Alguien debía ...
... un trozo de versos, y despidámonos.Y Daniel entrando a su gabinete abrió su escritorio y sacó un billete de quinientos pesos.-Ahí tiene usted para la llave y para comprar dulces en el paseo que hará ...
... . Mira al mar. Yo he doblado los codos en la borda, y miro también al mar.Luego, saco un cigarro y lo enciendo. Inspírame agria curiosidad la espontaneidad del sentir de la muchacha. Querría oírla ...
... recelo indefinible. Ninguna simpatía me infunden estos dos seres. Y, sin embargo, insisto, para quedarme en su compañía. Saco un par de monedas. -Agüela, dos duros m’ha dao esta ñora.La avidez ...
Grito de gloria& 160;: 36de Eduardo Acevedo Díaz Ella present& 237;a la proximidad de un gran dolor.Pero era uno de esos temperamentos que lo sofocan, que lo reconcentran y lo anidan en el pecho ...
... que dificultaba el atraque. Como entre esta enmarañada vegetación se abrían algunos caminos, Pizarro sacó la conclusión de que el país estaba habitado y desembarcó con la mayor parte de su gente ...
La Batalla de los Arapiles& 160;: 14de Benito Pérez Galdós March& 233; aquella tarde y parte de la noche, y despu& 233;s de dormir unas cuantas horas en Castrej& 243;n, dej& 233; all& 237; el caballo ...
... siga.-Bueno.Al volver Manuel a comer, la Salvadora le dijo que Jesús había ido conun saco oculto en la capa a una prendería de la calle del Noviciado.-¿Ves cómo es verdad?-Pues si lo cogen lo llevan ...
... vieja fué a casa del príncipe, que la estaba esperando. Desató un paquete que había traído, sacó de él unas ropas de mujer, y vistió con ellas al príncipe, acabando por envolverle con el gran izar ...
... debe estar bastante cocido " Y el hornero, riéndose de aquellas palabras que acababa de oír, sacó el pato del horno y se lo entregó con toda confianza al esclavo del kadí que apresuróse a llevárselo ...
... Woolley, comenzó sus excavaciones, que continuaron hasta 1934. Ayudado por centenares de cavadores, sacó a la luz más de 400 tumbas: «La Fosa de la Muerte», así llamó el a la necrópolis real ...
Mendizábal& 160;: 13de Benito Pérez Galdós Al quedarse solo, Mendiz& 225;bal escribi& 243; una carta de cuatro pliegos a C& 243;rdoba, General en Jefe del ej& 233;rcito del Norte. Con nerviosa mano ...
... menos tétrica a una casita que se elevaba al lado de una verja. Abrió la puerta con una llave que sacó del bolsillo, entró en una habitación pequeña, pobremente amueblada, encendió un candil, echó ...
... e volvió acto continuo a la cóncava nave.466 La fenicia, tomándome por la mano, me sacó del palacio, y, como hallara en el vestíbulo las copas y las mesas de los convidados que frecuentaban la casa ...
... Así es que Patillas rojas estaba derrotado, y yo fui quien encontró la caja, yo quien la abrió, yo quien sacó la guitarra, yo quien se sentó a su lado, yo quien sostuvo su pañuelo y sus guantes ...
... jorobado se echó a llorar...Entonces paró la burra para serenarse; se enjugó las lágrimas; suspiró hondamente; sacó los avíos de fumar; picó y lió un cigarro de tabaco negro; empuñó luego pedernal ...
... uno en otro país y cuando, inutilizado por el reuma, dio vuelta al lugarejo, hízolo con un saco de ideas que los aldeanos, no acertándolas a entender, tomaron por declarada chifladura.Con sus ahorros ...
... ordenaba Kafka, sin ya quitarse de encima la impresión de que la vida se le iba de las manos. Ni se sabe de dónde sacó fuerzas para escribir Josefina, la cantora...A principios de abril, ya víctima ...
... casaca en cuanto veía la posibilidad de un empleo. Como buen fanfarrón, gritaba mucho, y se cuenta que sacó cierta vez el revólver en medio de una de esas discusiones en que el aguardiente y el calor ...
2.114 palabras
Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar |
Más información