... a tierra para reponernos con algún alimento.Empezaba ya a hacer calor y traíamos una lasitud de hambre, pues estábamos en movimiento desde hacía cinco horas con sólo unas mates en el buche.Horacio ...
... supuesto. Dan de comer al hambriento y visten al desnudo. Pero sus almas pasan hambre y ellos mismos están desnudos. Nuestra raza ha dejado de tener valor. Quizá no lo haya tenido nunca. El miedo ...
... daba forma a figuras quiméricas y hacía risueñas ensoñaciones.Su madre le salvó de las alucionaciones del hambre mandándole furtivamente «sabrosas tortas y suculentas tajadas». Al final del verano ...
... a Nur, todo encadenado, en la cuadra del palacio, adonde por el momento pensaba torturarle de hambre y sed.Y he aquí que el visir tuerto tenía en su cuadra dos caballos gemelos de una hermosura ...
... carrillos. Sobre todo el bravo Roldán mascaba con la voracidad y apetito de un jaque que tuviese hambre canina, y no se le presentase con sobrada frecuencia un banquete tan opíparo y sabroso.-Si mal ...
... en tierra por temor de los animales que había visto. Comí del bizcocho ya remojado, que la necesidad y la hambre no reparan en nada. Llegó la noche, menos escura que había sido la pasada; pareció ...
... ; y encerrado luego en las murallas de Pavía, luchando con los dolores de la gota y los rigores de la hambre, bastó su constancia á resistir los ataques del exército de Francisco I, adquiriéndole ...
... boca, no; por lade otro, a la de mi vecino.» Convidaron a los oficiales. Menos, antes dijeron que moriríande hambre en cuatro días si en la boca la tomasen, especialmente los sastres. Losmercaderes ...
... de la blusa la carne costrosa, libre de camisa, con la cara pálida, la piel temblona por el hambre de muchos años y el horrible aspecto de náufragos arrojados a una isla desierta. Eran los chicos ...
... guerra; el arquero de sonrisa repugnante con las flechas de la peste; al avaro calvo con las balanzas del hambre; al cad& 225;ver galopante con la hoz de la muerte. Los reconoci& 243; como las & 250 ...
... estaría orgulloso de mostrar una conquista semejante. Luego, cuando se ha caminado mucho tiempo, llega el hambre: DArtagnan tras algún tiempo había notado esto. Harían breves comidas encantadoras ...
... dan Vds. su venia para retirarme? -& 191;Tan pronto, padre? & 161;Que siempre nos ha de tener Vuestra Reverencia con hambre de su compa& 241;& 237;a -Bastante os acompa& 241;o, hijitas m& 237;as ...
... buena idea de m& 237; ... & 191;Iba yo a consentir que tus hijos, estos borregos de Dios, tuviesen hambre?... Deja, d& 233;jate el dinero... O mejor, para que no lo tomes a desaire, part& 225;moslo ...
... haber caído en tales manos, pues con otra pupilera no le habrían faltado ocasiones de morirse de hambre, por aquella costumbre evangélica de no pedir nunca. Era, en fin, alma sencillísima, toda pureza ...
... se le descubre el remiendo del zapato, el trasudor del sombrero, la hilaza del herreruelo y la hambre de su estómago »Todo esto se le renovó a don Quijote en la soltura de sus puntos, pero consolóse ...
... dice. La mujer del 32 tenía veinticinco años, era extranjera; había venido a España por hambre, en calidad de institutriz en una casa de la nobleza. La enfermedad la había hecho salir de aquel asilo ...
... bocados - dijo éste, y se lo comió todo sin dejar miga; pero tampoco bastaba para aplacarle el hambre, y dijo entonces:- Padre, bien veo que en vuestra casa nunca me hartaré. Si me traéis una barra ...
... 237; Rodeado de desastres, amenazado como todos los gerundenses de los horrores de la guerra, del hambre y de la miseria, tengo que fingir junto a esta ni& 241;a infeliz unbienestar y una paz que est ...
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