... de la ribera.La noche estaba estrellada y tranquila.Percib& 237;ase apenas el escarceo de las olas al lamer mansamente las pe& 241;as de la costa, destellando p& 225;lidos reflejos; y a la distancia ...
... clavó la lengua en aquella boca cálida y amplia. Echó el cuerpo sobre ella y no dejaba de besarla, de lamer la piel, el cuello, los pechos abombados, mientras se despojaba del pantalón.Dani, exhausto ...
... yo tengo sed y el humor me infla,tú tienes el ardor y la testa que te duele,y, a lamer el espejo de Narciso,no harÃan falta discursos para moverte.En escucharlos estaba yo muy atentocuando el Maestro ...
... , disfrazan las legumbres porque no sean conocidas y las compren los enfermos. Elingatis dicen lo que es lamer, catapotia las pÃldoras, clÃster la melecina, glans o balanus la cala, errhina moquear ...
... y vestirte. ¿Habrá quien adule al pobre? No... Los que tienen almibarada la lengua váyanse a lamer con ella la grandeza estúpida, y doblen los goznes de sus rodillas donde la lisonja encuentre ...
... la pareja lo entienda. Por ej., los contactos sociales de la piel, tales como mordiscar y lamer, se interpretan como señal de buena disposición al contacto. Los movimientos expresivos pueden adquirir ...
... mano de hombre parecÃa endurecida por el pisoteo de la hacienda que, cuando estaba el rancho solo, venÃa a lamer la sal del blanqueo.Don Sixto Gaitán, hombre seco como un bajo salitroso y arrugado ...
... llegas, Sabino -le dijo Ans& 243;tegui-. Ni reba& 241;aduras hay ya. Como no te entretengas en lamer todos los platos...-Gracias: vengo del caf& 233; de Posi, donde Blas Arana y yo hemos partido media ...
... vuelo de un momento a otro. El perro rondaba el fúnebre catafalco, estirando el hocico, queriendo lamer las frÃas manecitas de cera, y prorrumpÃa en un lamento casi humano, un gemido de desesperación ...
... , Gedeón, borrico de mi arma, que te aviso que pa otra ves que derrames el dulse por el piso, te hago lamer el suelo con la boca... hasta que no quee rastro... ¡Ay Jesú, don Benisio Los asistentes ...
... vuelo de un momento a otro. El perro rondaba el fúnebre catafalco, estirando el hocico, queriendo lamer las frÃas manecitas de cera, y prorrumpÃa en un lamento casi humano, un gemido de desesperación ...
... y vestirte. ¿Habrá quien adule al pobre? No... Los que tienen almibarada la lengua váyanse a lamer con ella la grandeza estúpida, y doblen los goznes de sus rodillas donde la lisonja encuentre ...
... llegas, Sabino -le dijo Ans& 243;tegui-. Ni reba& 241;aduras hay ya. Como no te entretengas en lamer todos los platos...-Gracias: vengo del caf& 233; de Posi, donde Blas Arana y yo hemos partido media ...
Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadÃstica en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar |
Más información