... el mismo camino.El trigo del pegujal estaba hermoso, pero tenía mucha yerba.-La yerba se despierta, dijo Ventura.-En llamando el tiempo a la yerba, repuso...
... nen vara y media de largo, se ven marchar a compás, dándose lugar uno a otro y dejando la yerba postrada en lomos o caballetes. De cuando en cuando se paran a afilar las hoces con un pedazo de piedra ...
En este último capítulo abordamos la evolución general de la agricultura en el periodo, la participación de las diferentes provincias y, particularmente, la importancia agraria del sur estudiado. ...
... , de Roberto Sosa, codifica el enfrentamientoclasista, en el que se dignifica a un campesinado («La yerba cortadapor los campesinos es igual a una constelación./ Una constelación es igual auna piedra ...
... bosquecillos, o de bosques de quebracho colorado. En la parte más oriental de Paraguay se encuentra la yerba mate y la esencia de inga. La fauna es también muy variada, con abundantes especies raras ...
... buscándola por todas partes sin poder hallarla, vinieron a parar a un prado lleno de fresca yerba, junto del cual corría un arroyo apacible y fresco; tanto, que convidó y forzó a pasar allí las horas ...
... el mismo camino.El trigo del pegujal estaba hermoso, pero tenía mucha yerba.-La yerba se despierta, dijo Ventura.-En llamando el tiempo a la yerba, repuso...
... & 243; la sangre en mis venas, dej& 225;ndome at& 243;nito y paralizado. Quise huir y hundime en la yerba seca. Revolv& 237; los ojos en torno m& 237;o, y aument& 243; mi terror al ver que se dispon ...
... consistencia de las venas de su capa, admira su dureza, el color verdoso de la retorcida yerba, toda llena de ráfagas negras y de costurones y cicatrices como piel de veterano. Parece, por partes ...
... suelo, boca abajo. El mozo obedeció.-Más pegado al suelo, más: mete bien los morros en la yerba: así. Ahora berra todo lo que puedas hasta que el becerro te conteste... ¡Vamos, hombre ... ¡Ajajá ...
... buscándola por todas partes sin poder hallarla, vinieron a parar a un prado lleno de fresca yerba, junto del cual corría un arroyo apacible y fresco; tanto, que convidó y forzó a pasar allí las horas ...
... lleno,De la fruta, el zurrón, casi abortada,Que el tardo otoño deja al blando senoDe la piadosa yerba encomendada:La serva, a quien le da rugas el heno;La pera, a quien le da cuna doradaLa rubia paja ...
... ideas adquiridas ya, es decir, la mala yerba que ha echado raíces y todo lo invade? -Hombre, por Dios. ¡La yerba ... me río yo de la yerba. Nuestro...
... casa querida Ahora... a dormir otro poquit& 237;n& 187;.Y tendido nuevamente en su lecho de yerba, zarandeado por los traqueteos del veh& 237;culo, sigui& 243; repitiendo: & 171;& 161;A casa ...& 187 ...
... a cintura, y las obreras deshaciendo el lombío con el mango de la rastrilla, o atropando con ella la yerba oreada, y amontonándola en hacinas... Y luego entrar el carro con sus horcas y dobles teleras ...
... reprim& 237;a con diestra mano sus impulsos, ora se arrojaba de sus lomos y se tend& 237;a sobre la yerba para recoger en el suelo firme con o& 237;do atento los rumores, descubr& 237;ase al agente ...
... una m& 250;sica feroz, enderezose, hasta quedar sentada; arranc& 243; furiosa con ambas manos la yerba que arroj& 243;, haciendo una mueca de m& 225;scara hacia el rumbo del escuadr& 243;n, y dejose ...
... , y llen& 225;ronse las calderas de asa que deb& 237;an recostarse al fuego para el «mate» de yerba misionera.Con los juncos, de un peque& 241;o «estero» de all& 237; poco distante, construy& 233 ...
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