... ...?-- ¡María, callate --respondió con voz cavernosa don Gaetano.--Sí, ¿quién te sacó el hambre y te vistió...? Yo, strunzo... yo te di de comer --y la mano de lamujer se levantó como si quisiera ...
... tendidos entre dos sepulcros, resguardados del viento, pudimos descansar ydormir.A medianoche nos despertamos de hambre y de frío. Nos levantamos, salimos del cementerio yechamos a andar.<<< ...
... vendiendo leche y legumbres, lavando ropa, hilando de noche. Y una tarde, cuando el hambre y la pena le arrancaban lágrimas, en el huerto contiguo a su choza, junto al pozo, donde en otro tiempo ...
... alto de la calle de Ministriles, supo que en los desvanes de la misma casa se moría de hambre una familia. ¡Morirse de hambre Esto se dice; pero rara vez existe en la realidad. Subió...
... agudo y muy prontos a cualquier ruido, pero entonces aquellos, hechos todavía más vigilantes e inquietos con el hambre, sintieron muy pronto la subida de los Galos, y corriendo con gran estrépito ...
... , con idea de emprenderla por un río llamado San Juan, que desemboca al Oeste de la bahía del Hambre. Sin duda, internándose aguas arriba, habían de encontrar a los hombres bárbaros y talludos dueños ...
... carta que tiene l& 225;stima de m& 237;. El administrador ha recibido orden de no dejarme morir de hambre. Gracias a esto y al buen surtido de mi antiguo guarda-ropas, la pobre condesa no pedir& 225 ...
... la comodidad que les podía ofrecer la tierra; el esquife, sin remos y sin bastimentos, y la hambre sólo detenida de la pesadumbre que sintieron.Mauricio, que había quedado por patrón y por marinero ...
... son generosos.-Sí, lo son, lo son -exclamó la madre-. ¡Oh, aquí hubiéramos muerto de hambre Pero ¿qué vale el vivir, si lo que más amamos en el mundo, si mi buen marido, el padre de esta niña ...
... cada teja que se rompía, de cada árbol que se secaba. Soñaba yo, así literalmente, con los miedos de hambre que años y años había pasado en casa de mis padres, y para toda la vida se me había pegado ...
... Santo Tomás, cuando hasta los más ingenuos habitantes de Leipzig sufrían, como pesadilla, escenas de hambre y se despertaban al alba como quien cree oír cañonazos.La guadañaLa tragedia de la familia ...
... envidia, la soberbia, unida a la incapacidad, la impotencia y la ignorancia; ¿qué te parece? ¿Confundir los efectos del hambre canina y del empalago? Cosas de pseudos.<<< Prólogo - I - II ...
... la faz del recién nacido y del moribundo, la queja melancólica del corazón humano que siente hambre de ser y pena de existir, la dulcísima aspiración a otra vida, o la patética memoria de otro mundo ...
... estratagema y consiguieron cogerme todo ese dinero, echándome luego de la casa ¡Y para no morirme de hambre me he visto obligada a mendigar por las calles "El dijo: "¡Oh madre mía, ya no tienes ...
... tiempo. Entraba gente y les formaban corro. Deshacíase luego la tertulia entre el hambre y la languidez del mediodía, y un ruidosísimo bostezo del tonto Alberto, allá constantemente solo en el rincón ...
... beso por encima del dolor. Doliente el amoroso, dijo:-¡Tengo hambre de ti Y dejándola, fue a abatirse en la butaca.-¡Tengo hambre de ti ¡Mucha hambre de...
... tenido delante, que dirán lo que quisieren. He declarado dudas, sentenciado pleitos, siempre muerto de hambre, por haberlo querido así el doctor Pedro Recio, natural de Tirteafuera, médico insulano ...
... , Argelia.Un niño de Cámbela, Etiopía, país especialmente azotado por la sequía y su secuela el hambre.La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Agricultura y Alimentación, reunida en Hot Springs ...
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