... Parecía que los dos habitantes de la barraca se hablan ahorcado de la techumbre.<<<Cañas y Barro de Vicente Blasco Ibáñez I -II -III -IV -V -VI -VII -VIII -IX -XISBN 978-84-9963-012-0>& ...
... , los que ven que Marqués, pierdo el Ducado de Milán.<<<Celos con celos se curan de Tirso de Molina Personas - Acto I - Acto II - Acto IIIISBN 978-84-9963-013-7>>>
... dejaba escapar por primera vez en su existencia sordas maldiciones y atroces blasfemias.Cuestión de ambiente de Antonio de Hoyos y VinentPrólogo -I -II -III -IV -V -VI -VII -VIIIISBN 978-84-9963-422-7
... al apetito, 335y su codicia encender.<<<Don Gil de las calzas verdes de Tirso de Molina Personas - Acto I - Acto II - Acto IIIISBN 978-84-9963-020-5>>>
Doña Berta Capítulo XIde Leopoldo Alas Y aquella noche soñó doña Berta que de un pueblo remoto, allá en los puertos de su tierra, donde había muerto el pintor amigo, llegaba como por encanto, con ...
El amigo Manso Capítulo XIVde Benito Pérez Galdós Capítulo XIV - ¿Pero cómo, Dios mío, nació en mí aquel propósito?¿Nació del sentimiento o de la razón? Hoy mismo no lo sé, aunque trato de sondear ...
... imperan valores de la decadencia, valores nihilistas.El Anticristo de Friedrich Wilhelm NietzschePrólogo - I - II - III - IV - V - VI - VII - VIII - IX - X - XI - XII ...
... el estío de la juventud(1651)deBaltasar Gracián& 164; & 164; & 164; & 164;Índice El Criticón - Primera partePreliminaresCrisi I -Crisi II -Crisi III -Crisi IV -Crisi V -Crisi VI -Crisi VIICrisi VIII ...
El Gran Teatro del Mundode Pedro Calderón de la Barca LABRADOR ¿Quién vio trabajo mayor que el mío? Yo rompo el pecho a quien el suyo me dio porque el alimento mío en esto se me libró. Del ...
... Cañas, cerrando con sus labios los ojos del hampón, bebió aquellas dos lágrimas. El hampón de Joaquín DicentaCapítulo I -Capítulo II -Capítulo III -Capítulo IV -Capítulo V -Capítulo VI -Capítulo VII ...
& 160;19Pág. 19 de 31El pesimista corregidoSantiago Ramón y Cajal¡Quién lo diría Hasta el arroyo se había ennoblecido. Heridos oblicuamente por el sol, que resplandeció un momento entre nubes, ...
El Señor de Bembibre Capítulo XXVIde Enrique Gil y Carrasco Buen rato antes de que asomase por entre las nieblas del oriente la aurora pálida y descolorida de aquel día en que debían suceder tantos ...
El Señor de Bembibre Capítulo XXXIVde Enrique Gil y Carrasco El honrado montañés que vio tan bien terminada la causa de los templarios a despecho del encono que los Castros abiertamente y el infante ...
XXIII: Otra vez el desierto y las consabidas voces& 160;23Pág. 23 de 36El sombrero de tres picosnoneLa única aventura que le ocurrió a la navarra en su viaje desde el molino al pueblo, fue asustarse ...
El Terror de 1824& 160;: 19de Benito Pérez Galdós El licenciado Lobo, asesor privado del se& 241;or Chaper& 243;n, ten& 237;a su oficina en el & 225;ngulo m& 225;s oscuro y apartado de la planta baja ...
España sin Rey& 160;: 28de Benito Pérez Galdós Y era verdad que tomaba el billete en la estaci& 243;n de Barcelona; mas no para Zaragoza, como pens& 243; don Wifredo, sino para Tarragona. No iba sol ...
... golubtsi, etc.A las influencias más tardías pertenece la germano-holandesa, en tiempos de Pedro I, de la que fueron tomados el fogón como nuevo tipo de hogar y los recipientes adecuados para guisar ...
... queda mucho por conseguir.Alexander Fleming (GP) de Alexander Fleming Introducción Alexander Fleming -I. Unos Granjeros Escoceses -II. Alexander Fleming y Londres -III. En el Hospital de Santa Maria ...
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