... esto el prisionero español aún no había sido rescatado. Las Casas, sabiendo ya en qué aldea se encuentra, envía una de sus cartas pidiendo que fuera bien tratado. Cuando se aproximan al poblado ...
... habría olvidado... Mas encontrármela al cruzar por una aldea, al amanecer y como sola en el mundo ... obligado a hacer tan larga parada en aquella aldea por resultas de una enfermedad. ...
... no sentiré mucho el ausencia de Grisaldo, estando en vuestra compañía.-Pues, ¡ea -dijo Florisa-, que el aldea es lejos y el sol mucho, y nuestra tardanza de volver a ella notada. Vos, señor Grisaldo ...
... , dis: Los gallos furtados désta creo que sean pagados et escotados. Tendiose a la puerta del aldea nombrada, físose como muerta, la boca regañada, las manos encogidas, yerta e desfigurada ...
... de persignarse, y siguen a la ermita.La multitud rebosa en el atrio -no es capaz la nave para toda la aldea-. Las campanas llaman a oración. Los cirios arden sobre el altar. Parecen lágrimas de luz ...
... cariño profundo, el enamorado viajó de la capital a la lejana provincia donde se encontraba la aldea, con el romántico propósito de desenterrar el cadáver y apoderarse de sus preciosos cabellos. Llegó ...
Caperucita Rojade Charles Perrault En tiempo del rey que rabió, vivía en una aldea una niña, la más linda de las aldeanas, tanto que loca de gozo estaba su madre y más aún su abuela, quien le había ...
... su sueño a las gentes honradas para decirles chanzonetas ínsulas. Teobaldo, lleno de asombro, abandonó la aldea y se dirigió al castillo, a cuyas puertas llegó cuando apenas clareaba el día. El foso ...
... sint& 233;tico: & 161;Beethoven abrazado con Ambrosio Par& 233; Naci& 243; en una aldea tan c& 233;lebre en el mundo como Babilonia o Atenas, aunque en ella no ha pasado nunca nada: el Toboso. Diole ...
... secamente Fernando, en quien se rebeló el orgullo de secta al oír que se compadecía de él un pobre cura de aldea; pero considerando que, si había de dar algún fruto su tentativa, necesitaba pasar ...
... cosas raras, amigo escribano.-Cosas raras, amigo alcalde. ¿Qué ocurre?-¡Los mozos de la aldea se han vuelto locos Andan en tropel por la calle cometiendo toda clase de fechorías... A tu merced ...
... y agradable tributo, fui yo nascida y criada, y no en tan baja fortuna que me tuviese por la peor de mi aldea. Mis padres son labradores y a la labranza del campo acostumbrados, en cuyo ejercicio ...
... cristianos que miraban en agüeros. Y no es menester hacer hincapié en esto, sino pasemos adelante y entremos en nuestra aldea.Llegaron los cazadores, pidieron su liebre, y diósela don Quijote; pasaron ...
... , y, entrando otra vez en el carro precedida de Gil Gil, dijo de esta manera:-Aquella aldea que ves sobre un monte es Getsemaní. En ella estuvo el Huerto de las Olivas. A este otro lado distinguirás ...
... solemne fiesta, la cual venida, fue con grandísimo regocijo y aplauso de todos los moradores de nuestra aldea y de los circunvecinos lugares solemnizada. Y, después de acabadas en el templo las sacras ...
... exceso de palabrería, nunca han sido superados. Stalin exclama con orgullo: «La vieja aldea, con su iglesia bien visible, con sus más elegantes casas pertenecientes al uriadnik, al pope, al kulak ...
... ; en el olvido? & 191;No acab& 243; sus d& 237;as Hern& 225;n-Cort& 233;s oscurecido en una aldea? & 191;Y qu& 233; dir& 233; de Cervantes?... & 161;Vive Dios, que si no me daban la plaza, yo hab& 237 ...
... se hubo de partir con él, dejando concertado Damón con Tirsi que se viesen aquella noche en el aldea o cabaña de Elicio, para dar orden de volverse a la suya. Aurelio y Timbrio preguntaron a Erastro ...
... a amistad de un corazón fiel y confiado... ¡por un don Juan de similor, por un elegantón de aldea, por un parisién de temporada, por un busto hermoso, por un Narciso estúpido, por un egoísta de yeso ...
... de Rosaura y Florisa, y de la hermosa y recién casada Silveria, con otras dos pastoras de la mesma aldea. Y, puesto que Galatea vio venir a los pastores, no por eso quiso dejar su comenzado canto ...
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