... Istmo, hecho mesonero, fiambre vende, y los que prueban de ella hacen plegarias por que el fin del año el avaro TemÃstocles no vea. Pero todavÃa usó Timocreón de más amarga e insolente maledicencia ...
... diciendo por ahà que le ha llenado la tripa. (Asà hablan los gangueños). D. Olimpio es avaro. Tiene dinero. ¿Sabe usted lo que gana con la tienda?-Volvamos a lo principal -le interrumpió Baranda ...
... dinero, dinero y nada más: su hambre de oro no expresaba ningún deseo, era la animalidad descarnada del avaro. QuerÃa ahorrar y asà lo hacÃa, sobre su hambre, sobre su sed, a despecho de la salud ...
... sus mocedades a probar suerte en AndalucÃa, y allÃ, fregando la mugre del mostrador de un amo avaro y cruel, supo ahorrar y aprender lo suficiente para establecerse de cuenta propia en una taberna ...
... muerte, fue una patente prueba de los goces, satisfacciones y bienes que saca el miserable avaro de su dinero. Murió ab intestato, y sus herederos, a quienes se avisó por los diarios, cuando acudieron ...
... , lo vierte y derrama fuera, y al derramarlo, se le acrecienta, con lo de los demás; y, por el contrario,cuando, avaro de sà mismo, se recoge en sà pensando mejor conservarse, acaba por perderlo ...
... decir sipa entre el Savena y el Reno;y si de ello quieres fe o testimoniotrae a memoria nuestro avaro seno.Asà hablaba cuando lo azotó un demoniode su escuadra, y le dijo: ¡Anda,rufián aquà no hay ...
... esta se& 241;orita -contest& 233; indignado-. & 191;Tanto valen estas baratijas, Sr. Candiola? El avaro no me contest& 243;, ni se opuso a que diera de beber a su hija; mas luego que esta calm& 243 ...
... servidor.No me siento con las demás flores, ni alzo la cabeza hacia mi comensal.Jamás soy avaro de mi perfume para aquel que desee aspirarlo, y jamás me rebelo a la mano que me coge.A cada instante ...
... habÃa ido sacando del bolsillo. SonreÃa, sonreÃa con la persuadida fuerza de su tentación de avaro, al ver que Esteban le habÃa escuchado sonriendo...Y la sonrisa se le cortó en un pasmo de sorpresa ...
... su naturaleza, francamente refractaria a vivir bajo fanales. Nunca fue niño mimoso ni asombradizo, aunque sà muy avaro del calor del hogar y de la familia. No llegó a perdulario, ni con cien leguas ...
... perdÃa el agradecimiento que profesaba a aquellos Palomas desde la niñez. Y con su minuciosidad de avaro, iba contando lo que Tonet consumÃa en el establecimiento y la prodigalidad con que convidaba ...
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