... dientes con tanta fuerza, que no pude desencajar las mandíbulas. Y quise gritar, pero de mi boca no salió más que un sonido inarticulado y sordo. Y sufría horriblemente. Y eché a correr de un lado ...
Luchana& 160;: 38de Benito Pérez Galdós Arreci& 243; en el curso del d& 237;a el temporal, sin que su violencia estorbara a las valientes tropas isabelinas para lanzarse a la pelea. Desde el camastro ...
... . Tras la primera gran guerra pudo incluso extender su imperio. En la segunda lo perdió. Salió de ella indemne pero convertida en una potencia de segundo orden.Adolfo Hitler, principal causante ...
... D. Fulgencio soportó con humildad evangélica... Pero lo más gracioso fue la escena final... Salió escapado el escolapio corriéndose del gabinete a la sala; pero con el azoramiento de la huida ...
... delante. -¡Ay ... Eso se dice, eso se intenta... pero no siempre el corazón se pone donde quiere, donde debe... Adiós. Salió Calpena de la triste casona; palpando paredes se encaminó a su alojamiento ...
... a caballo como los de a pie. En efeto, ellos se pusieron en el llano, a la salida de la sierra, y, así como salió della don Quijote y sus camaradas, el cura se le puso a mirar muy de espacio, dando ...
... re el pecho, encerrando así mi emoción.Afuera los caballos relinchaban.Don Segundo se puso en pie, salió un momento, volvió con un par de riendas tiocas y fuertes.-Traime un poco de sebo, muchacho ...
... . En 1582, por encargo del virrey de México Pedro Moya y Contreras, realizó una expedición, que salió de Acapulco y llegó a Manila y Macao, con objeto de encontrar refugios para las naves de Filipinas ...
... e mover la cabeza, recibió mis órdenes, que se limitarona encargarle un poco de té para la señorita, y salió de la estancia, en apariencia muy deprimido.Me molestó la atmósfera de aquella estancia ...
... tomando su cerveza...; tal otro en el Ateneo, en tal rincón.Entró Marciana. Le sirvió el café y salió sin ruido, sin osar hablar. Creería la pobre que hubiera de espantarle grandiosas inspiraciones ...
Los cuatro jinetes del Apocalipsisde Vicente Blasco Ibáñez Tercera ParteII - En el estudioAl abrir una tarde la puerta, Argensola qued& 243; inm& 243;vil, como si la sorpresa hubiese clavado sus pies ...
... después de componer los pliegues, la colgó de un clavo que había junto al torneado lecho, y al punto salió de la estancia, entornó la puerta, tirando del anillo de plata, y echó el cerrojo por medio ...
... títulos por sus estados, diciendo: «Bueno anduvo Almazán; mucho debo a Fuensalida; galán salió Fuensaldaña», sino que estéis obligadas a decir: «El duque, mi señor; el marqués, mi señor; el conde ...
... libros de Mafalda, en los que se reunían las tiras según su orden de publicación. El primero de ellos salió a la venta en diciembre de 1966 y en tan sólo dos días se agotaron los 5.000 ejemplares ...
... mejillas.-Necesito matar esta sensibilidad- se dijo con cólera-. Me vendería.Tomó un periódico y salió al jardín.Temblando y bien oculto tras un árbol, se atrevió a levantar losojos hasta la ventana ...
... toro -Si estáis enfermos, dulces ojos claros -Don Félix, si al Amor le pintan ciego -Salió Faetón y amaneció el Oriente -El cuerpo de Faetón Climene mira -Señor Liñan, quien sirve sin estrella ...
... a ayudar a pintar a la de alba, qe. se me metió en el taller a qe. le pintase la cara, y se salió con ello, por cierto qe. me gusta mas que pintar en lienzo, qe. también la he de retratar de cuerpo ...
... voz alta.Con una breve interjección, se metió la automática en el bolsillo de la chaqueta y salió del cuarto.¡Diamante Dick El nombre la había asaltado una vez desde la estridencia de una cubierta ...
... o menos cantidad de arcabuces, volvió las riendas a Rocinante, y a todo lo que su galope pudo, se salió de entre ellos, encomendándose de todo corazón a Dios, que de aquel peligro le librase, temiendo ...
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