... no toqué en nada por el presente,porque no fuese la falta sentida, y aun, porque me vi de tanto bien señor,parecióme que la hambre no se me osaba allegar. Vino el mísero de mi amo, yquiso Dios no miró ...
... no toqué en nada por el presente,porque no fuese la falta sentida, y aun, porque me vi de tanto bien señor,parecióme que la hambre no se me osaba allegar. Vino el mísero de mi amo, yquiso Dios no miró ...
... no toqué en nada por el presente,porque no fuese la falta sentida, y aun, porque me vi de tanto bien señor,parecióme que la hambre no se me osaba allegar. Vino el mísero de mi amo, yquiso Dios no miró ...
... no toqué en nada por el presente,porque no fuese la falta sentida, y aun, porque me vi de tanto bien señor,parecióme que la hambre no se me osaba allegar. Vino el mísero de mi amo, yquiso Dios no miró ...
... había, llamada Ana,entre otras damas bellas y hermosas;tomó paga del cuerpo una mañana, forzada de la hambre, y echa iguala,al pretensor envía en hora mala.Era el galán pretenso un marinero,el precio ...
... -156-1Capítulo XXXIILuchana& 160;: 32de Benito Pérez Galdós Rendido de fatiga y con m& 225;s hambre que c& 243;mico en Cuaresma, arrib& 243; Valent& 237;n al cuartel de la Plaza, donde tuvo la suerte ...
... no viene aqu& 237; m& 225;s que a comer? Pues & 191;qu& 233; cree Vd.?, muertos de hambre est& 225;n ellos en su tierra, y harto saben los muy pillastres d& 243;nde lo hay. Si es lo que yo he dicho ...
... creer en Dios. Y creer en Dioses ante todo y sobre todo, he de repetirlo, sentir hambre de Dios, hambre de divinidad, sentir suausencia y vacío, querer que Dios exista. Y es querer salvar...
... lágrimas y reanimó sus iras. Estaba dispuesto ano volver a casa del señor Custodio, aunque se muriera de hambre.La ira le subía en oleadas a la garganta; sentía furor negro, vagas ideasde acometer ...
... casadas como doncellas, manejaban las bombardas, trabucos, cortantes y otras diversas artillerías. Y fue tal el hambre que pasaron los vianeses, que viéronse obligados a comer caballos e otras fieras ...
... pequeño Muriel tenía el vestido hecho jirones, y su semblante demostraba a la vez hambre y tristeza. Miraba con atónitos ojos cuantos objetos y personas se le presentaban, y no se atrevía a contestar ...
... , con idea de emprenderla por un río llamado San Juan, que desemboca al Oeste de la bahía del Hambre. Sin duda, internándose aguas arriba, habían de encontrar a los hombres bárbaros y talludos dueños ...
... el tribunal, multa; al que se negaba a cumplir la sentencia le quitaban el agua para siempre y se moría de hambre.Con este tribunal no jugaba nadie. Era la justicia patriarcal y sencilla del buen rey ...
... botella de Cariñena. Mandaremos por unos buñuelos a la taberna de la esquina. Lázaro tenía un hambre espantosa. Desde de las nueve de la mañana no había probado cosa ninguna, y el cansancio del camino ...
... fama, y si los vinos de esta tierra no han decaído. Sóloaquí puede comerse el Brie fresco, y yo tengo hambre de este quesohace muchos años.El marqués rió. ¡Hacer un viaje de tres mil leguas de mar ...
... para llevar algo a la boca. & 161;Oh, qu& 233; desenga& 241;o Est& 225;bamos muertos de hambre y cansancio, y se nos dijo que no hab& 237;a m& 225;s que un tercio de raci& 243;n. Pero nosotros & 233 ...
... que don Ricardo no estaba y que no volvería hasta las doce. Como a nadie podía confiar la carta, y el hambre le apretaba, se fue a comer un bocado en un bodegón de la calle de la Paz. Minutos después ...
... al lado, en aquel banco, completamente lelo, babeante de admiración erótico-mística, de quinina y también de hambre, hay que reconocerlo. Si fuera posible salir de la propia piel, yo habría salido ...
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