... las finas y altas botas de tafilete color bronce. De otro, un enorme pastel comprado en La Pajarita, al paso del correo. Además, traía un ratón mecánico, dos «Toribios» y sobres comerciales ...
... ser los dos solos en s& 237;, reconocerse en medio de los espacios de la vida, como pajarito y pajarita que se encuentran en la espesura de la selva, y, salud& 225;ndose con sus piquitos, se unen ...
... no pensaba en él, y sólo le servía de tópico de conversación en las visitas de cumplido. La del Banco, como pajarita de las nieves, saltaba de piedra en piedra, esquivaba los charcos, y de paso ...
... 191;Qu& 233; hab& 233;is hecho?& 191;Qu& 233; he de hacer? Pues nada, se& 241;ora Pajarita; nada m& 225;s sino seducir a una honesta hija de la Gran Breta& 241;a, llev& 225;rmela conmigo a Salamanca ...
... afilado y patillas de chuleta, y bajo la barba, asomando por entre las dos alas de un cuello & 171;a la pajarita & 187;, esa protuberancia horrible llamada nuez, que parece la condecoraci& 243;n ...
... ve y se oye. Al terrible veto escapa alguna frase aguda, que sale volando como & 225;gil mariposa o pajarita: & 171;Por mi salud, que estoy contenta. Y t& 250;, & 191;qu& 233; tienes? & 191;Por qu ...
... lágrimas». Más tarde vine a saber que todo aquel alboroto fue por un paquete de caramelos de la Pajarita. Otras veces la grave causa era «si tú me quitaste el periódico cuando yo lo estaba leyendo ...
... la mism& 237;sima miss Fly, la mism& 237;sima Athenais, la mism& 237;sima Pajarita.Quedeme absorto, y ella al punto saludome con una sonrisa vanagloriosa que indicaba su gran placer por la sorpresa ...
... afilado y patillas de chuleta, y bajo la barba, asomando por entre las dos alas de un cuello & 171;a la pajarita & 187;, esa protuberancia horrible llamada nuez, que parece la condecoraci& 243;n ...
... luz ardiente y dorada de la tarde, un poeta ha venido a contar la triste historia de la pajarita que murió de amor, y un músico, dotado de infinita poesía, recogió la esencia de los espacios azulados ...
IntroducciónLe Corbusier, con su típica pajarita, sostiene en sus manos la maqueta de uno de sus proyectos.EN el estudio de la calle Sévres la actividad era febril. Comenzaba la época de las grandes ...
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