... Marquesa se sonrió al oír este grosero y chabacano cumplido, y notar el airecito jaque de D. Roque al hacerlo. La sonrisa de burla y de supremo desdén de la Marquesa, fue interpretada en otro sentido ...
... 225;lido.-& 161;P& 225;lido -repiti& 243; Sola, que ten& 237;a sus claros ojos fijos en D. Benigno, y no perd& 237;a ni la m& 225;s ligera inflexi& 243;n de sus labios elocuentes.-Pues... pareci& 243 ...
... hermos& 237;sima, cuanto desgraciada se& 241;ora extranjera...? & 161;Oh , me enternezco, se& 241;or D. Francisco... Pero hablemos de otra cosa, cu& 233;nteme Vd. c& 243;mo ha sido esa batalla. & 191 ...
... hijos que tenia de legítimo matrimonio, á saber: D. Gonzalo, Obispo de Plasencia y Sigüenza, D. Alfonso, que lo fue de Burgos, D. Álvaro, Cronista del...
... pronto. En esto oyéronse acompasados taconazos en la escalera, que retemblaba cual si un gigante bajara por ella. Era D. Silvestre que volvía de su visita, trayendo un gran ramo de flores entre cuyas ...
... , dijo mal humorado:-¡Ni pago ni acepto El alma de Zaldúa hizo ni más ni menos lo que su propietario D. Fermín hubiera hecho en la tierra en situación semejante. No gastó el tiempo en palabras vanas ...
... Álvaro, luego,tomad: que en vano procuravuestra infame cobardíadarle treguas a mi furia.Tomad...D. ÁLVARO(Retirándose.) No, que aún fortalezapara resistir la luchade las mundanas pasionesme da Dios ...
... días después, habiendo sabido D. Roque por D. Jeremías la amistad demostrada por Reina y las ... diez años desde su llegada a Cádiz, la persona de D....
... al campo, necesitamos tres mil reales... y no digo cuatro porque no se asuste. Es lo & 250;ltimo. S& 237;, D. Francisco de mi alma, y confiamos en su buen coraz& 243;n...-& 161;Tres mil reales -dijo ...
... ; la se& 241;ora en volver de su soponcio, y abraz& 225;ndose nuevamente ambos, derramaron m& 225;s l& 225;grimas. D. Benigno dijo entre pucheros:-No m& 225;s pol& 237;tica, no m& 225;s tonter& 237;as ...
... ver realizado. Buen ánimo, y espera a que te den órdenes. Ya verás al reverendo Corchón; él y D. Buenaventura son los que en Madrid tienen hoy la clave del asunto. Yo creo que me iré otra vez a Ocaña ...
... vista. Pero en ese momento aparece el ministro D… Sus ojos de lince perciben inmediatamente el papel ... dessein si funeste,S’il n’est digne d’Atrée, est digne de Thyeste. Las...
... propio la escena del Pombal y escribo frases y digresiones Adelante, adelante. Y una cosa, señor D. Narciso: no hay que dejarse invadir por los recuerdos. No vale llorar ni rebelarse contra lo pasado ...
... Niedergang der römischenWelt, II, Berlin, 1978, 1557-1591.↑ D.G. Orr, cit. (n. 32) 1585, tav. X ... . Guzzo, Busti divini da Lavello, in Bollettino d’Arte72, 1992, 1-10; C. Masseria,...
... And Management. 21 (1) (2014): 83-93.93 Tasdemir, M. A., Tasdemir, C., Akyuz, S., Jefferson, A. D., Lydon, F. D. Y Barr, B. I. G. «Evaluation Of Strains At Peak Stresses In Concrete: A...
... -249.GRILLON, P., (1964), «Origines et fondation du Consulat de France à Alger(1564-1582)», Revue d’histoire Diplomatique, 78, pp. 97-117.GRIMALDI-HIERHOLTZ, R., (1994), L’ordre des Trinitaires ...
... dirección longitudinal al puente central (Sl) y transversal (St), en las resistencias a, b, c y d; sensibilidad del puente de Wheatstone y desplazamiento máximo en z para el diseño AC2-posiEn la Tabla ...
... SABATÉ, F. y FARRÉ, J. (coords.). El comtat d’Urgell e la Península Ibèrica, Lérida, 2002, pp. ... IX de Leão (solução das arras da raihna D. Teresa)», Revista Portuguesa de...
... de 1833).MILME, Edwars: Cours Elementaire d’histoire Naturalle. París: Imprimerie A. Lahure ... et en Amérique latine au XIXe siècle. Lille Centre d’Etudes Ibériques et...
... (dir.), 1994, ISBN 84-206-9684-6, págs. 195-212.• Carlos D’ORS FÜHRER. “Urbanismo, arquitectura y jardines en el Noucentisme”. En Arquitectura española contemporánea: documentos, escritos ...
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