... : no pasaba nadie; nadie entraba ni salía. Pipá escupió con fuerza por el colmillo. Era como decir: Alea jacta est. Con voz contrahecha, para animarse al combate, cantó, mirando a la bruja con ojos ...
... a que procediese al desarme (abril de 1859). El ultimátum fue rechazado, y Cavour pudo decir a sus amigos: «Alea jacta est. Hemos hecho historia, y ahora vamos a comer.» Francia entraba en guerra ...
... «dar una patada en la tierra para llenar Italia con sus legiones». César se decidió a marchar sobre Roma. «Alea jacta est», la suerte está echada. En enero del año 49 a. de C., pasó el Rubicón ...
... rapidez de ejecución de sus obras de César, como refleja la famosa frase que dijo pasado el Rubicón «alea jacta est» (la suerte está echada) o la no menos conocida «vini, vidi, vinci» (llegué, vi ...
... : no pasaba nadie; nadie entraba ni salía. Pipá escupió con fuerza por el colmillo. Era como decir: Alea jacta est. Con voz contrahecha, para animarse al combate, cantó, mirando a la bruja con ojos ...
... creyó que me había vuelto loco... Perdí el sombrero... y la cabeza con él. Octubre 17.Alea jacta est. A la bárbara provocación contestamos con un terrible «nos veremos». Contados están los días ...
... tiene otro destino en el mundo que estudiar la manera de pasar la vida sin contrariedades ni desazones. Pero alea jacta est: aquellas mujeres que se resolvieron a pasar una vez los límites del respeto ...
... creyó que me había vuelto loco... Perdí el sombrero... y la cabeza con él. Octubre 17.Alea jacta est. A la bárbara provocación contestamos con un terrible «nos veremos». Contados están los días ...
... rapidez de ejecución de sus obras de César, como refleja la famosa frase que dijo pasado el Rubicón «alea jacta est» (la suerte está echada) o la no menos conocida «vini, vidi, vinci» (llegué, vi ...
... a que aspiro y que conseguiré.» Esta escueta apreciación equivale, salvando las necesarias distancias, al alea jacta est de César. Cuando haya traspasado los Alpes, empezará a trabajar intensamente ...
... .» Siempre con el saco al hombro va de Ministerio en Ministerio pidiendo pedazos de pan para cambiarlos en su alea por influencias, por votos. Ha repartido más empleos de doce mil reales abajo ...
... ? ¿Y por qué no ha de servir volver atrás las jugadas? ¡Esto es la lógica Acaso esté ya la carta en manos de Eugenia. Alea jacta est A lo hecho, pecho. ¿Y mañana? ¡Mañana es de Dios ¿Y ayer ...
... contusiones, acepté el temperamento del sorteo, que como un anticipo sobre mi suerte constante en el " álea " de la vida, favoreció a Ocampo. Durante una semana lo espié, lo aceché sin reposo ...
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