... arranche. Como por ensalmo se le disipó el tedio, y cogiendo de las manos de Jusepa el candil de garabato, se fue así, dormitorio y a su rústico lecho, donde tan ricamente se tumbaba. Quedose Ángel ...
... yquieren decir las hubo de Antonio Pérez.—Ésa es una gran curiosidad —ponderó Critilo—, garabato para llevarse el mundo trassí. ¡Oh gran gracia la de las gentes —¿Y de qué son? —preguntó ...
... de gracias, seducciones y moner& 237;as de imposible descripci& 243;n. Ten& 237;a tal garabato para burlarse de Ostolaza y de m& 237;, elogi& 225;ndonos en apariencia, que ni & 233;l ni yo sab ...
... yo y Tomás. & 160;& 160;Bartolo:Yo soñaba que tenía una torrija en un plato, y que cierto garabato pescarme la pretendía. Mas como le vi llegar, dije: «por vida del Conde, que os coja ...
... de gracias, seducciones y moner& 237;as de imposible descripci& 243;n. Ten& 237;a tal garabato para burlarse de Ostolaza y de m& 237;, elogi& 225;ndonos en apariencia, que ni & 233;l ni yo sab ...
... su marido don Frutos, algún viejo manuscrito que la autorizara para pintar en sus carruajes algún garabato heráldico; ya que no león rampante en campo de gules, siquiera una mala barra de bastardía ...
... el señor alcalde.-¡Ave María -añadió otro-; tiene un garbo, un donaire, un garabato como ninguna.Dirigiendo los ojos hacia donde todos los tenían fijos, vi que sobresalía entre todas las sencillas ...
... gentes, anda, niña, que eres fea. No digo que soy bonita, ni que tengo garabato; pero tengo un no sé qué, que engatusa a más de cuatro. Aunque me dicen mocosa, tengo mi pelo peinado ...
... en la mesquita, non vayas a las preses.» Allí vino la lija en aquel desbarato, traía muy duro cuero con mucho garabato, et a costados e a piernas dávales negro rato, ansí trabava dellos ...
... y una gama impresionante de diálogos que son como chispazos de luz y de fuego.…El retinto garabato del bigote dábale fiero resalto al arregaño lobatón de los dientes que sujetan el fiador ...
... defendió y desenterró a lo largo de toda su vida el arte psicótico de los enfermos mentales, el garabato sin finalidad de los nai’f y las fantasías brutas de los domingueros como el cartero Cheval ...
... señores, se llegó a enamorar hasta el meollo del amante de su reina, y todo se lo llevó el diablo. -¿Cuál de estas dos tiene más garabato, señor don Quijote, la viuda Reposada o la dueña Quintañona ...
... rasón acabada, tirose, dio un salto, dexó a su amigo en la forca tan alto: quien al diablo cree, trával su garabato, él le da mala çima et grand mal en chico rato. El que con el diablo fase ...
... voy a dormir Creía que los señores estaban durmiendo, pero como les oigo charlar. Tengo que sacar el garabato. ¿No me morderán los perros? –preguntó, andando con cautela sobre sus pies descalzos ...
... señores, se llegó a enamorar hasta el meollo del amante de su reina, y todo se lo llevó el diablo. -¿Cuál de estas dos tiene más garabato, señor don Quijote, la viuda Reposada o la dueña Quintañona ...
... encantaban su linda dentadura, los hoyuelos de sus mejillas, sus negros ojos, el donaire o garabato que en su rostro picante corregía o retocaba la dudosa hermosura. Completaré la figura de Candelaria ...
... , ni manteadores, ni fantasmas, ni moros encantados; que si los hay, daré al diablo el hato y el garabato.-Pídeselo tú a Dios, hijo -dijo don Quijote-, y guía tú por donde quisieres, que esta vez ...
... hermosura; pero s& 237; que ten& 237;a lo que llamamos un gancho fision& 243;mico, un garabato facial, un mirar pill& 237;n y un fruncimiento de la boquita que a todos cautivaba, y con tal gancho a m ...
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