... Adiós, Fabián -le había dicho un joven vestido de gran señora, saludándolo con el pañuelo y el abanico, y dando al mismo tiempo ridículos saltos.-¡Mirad, mirad ¡Aquél es Fabián Conde -había ...
... trueno conmovió toda la huerta, despertando una tempestad de gritos y ladridos. Sento vio un abanico de chispas, sintió quemaduras en la cara, la escopeta se le fue y agitó las manos para convencerse ...
... mano un huevo deavestruz, pintado de rojo; la chinita vestía una túnica azul y tenía un abanico en la mano.Al movimiento de las pisadas en el suelo, los dos chinitos comenzaban a saludar amablemente ...
... el trato que les dan. Y está la romería plagada de estas tunantas, embusteronas. Lástima de abanico. -¿Ustedes duermen aquí? -la dije por tirarle de la lengua-. ¿No tienen miedo a que de noche ...
... un colectivo importante de personal técnico cualificado y, por lo tanto, bien remunerado. El abanico de los sueldos del personal técnico debe ser al menos tan amplio como el de los investigadores ...
... . -P. D. Si el asno del padre Corchón se va a Toledo, házmelo saber tocando, al entrar, con el abanico en el cepillo para la limosna de la santa Fábrica». Concluida la lectura, los dos personajes ...
... medio de evitarlo ...» Y sí, por largo trecho la madrileña baronesa tuvo que disimular detrás de su abanico las ganas de reír. Extenso en una suerte de romance, el narigudo señor Maza; bufo Cordón ...
... de Oscar Wilde de Oscar Wilde El retrato de Dorian GrayEl fantasma de CantervilleEl abanico de Lady WindermereLa importancia de llamarse ErnestoUn marido idealEl príncipe feliz y otros cuentosEl ...
... me refiero se encuentra a mi lado.Areba dej& 243; o& 237;r su risa armoniosa, y abriendo de golpe el abanico, interrog& 243; con mucha gravedad:-& 191;Cu& 225;ndo se recibe usted de m& 233;dico, amigo ...
... el centro enemigo de su derecha; pic& 243; junto a los escuadrones de reserva levantando en forma de abanico la tierra negra con una orla de briznas, y fue a rebotar en la cresta de la «cuchilla ...
... , ya muy corrida en noviazgos, según nos revela la cháchara transcrita, puso sus ojos, amparada del abanico, y con sus ojos su alma toda, en un palco frontero donde apareció Emilio Terry, objeto ...
... . Con su mano derecha nos muestra una rosa, tamaña como un cañamón, y en la izquierda tiene un abanico semiabierto, en el cual se lee su bonito nombre: «Isabel Godoy de la Hinojosa». La fecha ...
... inventa algo bueno, en vez de llevarle a la Universidad para que dé lecciones a los tontos, le meten en el Abanico para que las tome de otros más listos. ¿Qué resulta? que cada vez hay más pobres ...
... nunca?EMILIA.- Jamás, mi señor.OTELO.- ¿Ni ella os ha alejado?EMILIA.- Nunca.OTELO.- ¿Para buscar su abanico, sus guantes, su antifaz, ni nada?EMILIA.- Jamás, mi señor.OTELO.- Es extraño.EMILIA ...
... casa».-Luego le mandaré a usted una perdiz y dos entrecotes -dijo a Rosalía azotándola con su abanico-. No, no me lo agradezca... Si yo no lo he de probar. A mí me sobra carne... Ayer he repartido ...
... contempla desde la torre de la colegiata no tiene más defecto que el de parecer amanerado y casi, casi, de abanico. El pueblo, por dentro, es también risueño, y como está tan blanco, parece limpio ...
... (filosofía, sociología, etnología).En la actualidad, la arqueología investiga un amplio abanico de culturas de todos los ámbitos y épocas. Incluso al estudio de periodos recientes de la historia ...
... concurso. El aleteo de los abanicos me infundi& 243; & 225;nimos, no s& 233; por qu& 233;. Tras de cada abanico, adivin& 233; un coraz& 243;n de mujer... & 161;Ah , mujeres. & 161;A ellas , me dije ...
... Luis XIIILa venta de pescado en un mercado del siglo XVII. Escuela francesa. Decoración para abanico. París, Museo Carnavalet.Luis XIII coronado por la Victoria. Cuadro de Felipe de Champaigne. París ...
... ; la cabeza para verse la ca& 237;da de faldas por detr& 225;s, tom& 243; un abanico, dio el meneo a las varillas, que chillaron desarrollando un vasto paisaje poblado de amorcitos, y ech& 225;ndose ...
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