... . Abandónalo. No faltará quien te dé cobijo y un pan, ni quien te acerque un cuenco para saciar la sed. Trotacaminos. La locura es lo contrario de la prudencia. A medio vestir, armado con una clava ...
... de Julia. Hortensia bebió aquellas dos sonrisas como bebería dos gotas de agua un agonizante de sed. En torno a los jueces tomaron asiento los jurados. Un murmullo sordo circulaba por la estancia ...
... , derram& 225;ndose en la escalera. Pero de ning& 250;n modo pod& 237;a saciar la ardiente sed de sus ojos, que anhelaban ver a la hermosa dama. Sinti& 243; lejanos chillidos de ni& 241;os juguetones ...
... NOCHEElla dijo:... Y al ver aquello, el jeique Eblis se echó a reír, y exclamó: "¡Vaya un grupo ¡Sed amables, y cogedme entre vosotras dos " Y una gran carcajada recorrió la asamblea de los genn ...
... quisiera expresarle mi gratitud. Tratonos con miramiento; nos dio agua, pues ya est& 225;bamos muertas de sed, y no contento con esto, nos acompa& 241;& 243; un buen trecho, dici& 233;ndonos palabras ...
... de ellas estaban todos mis recuerdos de resero vagabundo y, más arriba, esa indefinida voluntad de andar, que es como una sed de camino y un ansia de posesión, cada día aumentada, de mundo.A pedido ...
... podéis comprender, conde, qué apurado me encuentro... ¡Ah , ¡qué dichoso sois al ser libre -¡Pues bien , sed libre también, ¿quién os lo impide?, decid.-¡Oh , sería un desengaño muy grande ...
... excusa " Ella preguntó: "¿Y cuál es tu excusa?" Contesté: "¡Soy un extranjero que padece una sed de la que voy a morir " Ella contestó: "¡Aceptamos esa excusa, pues, ¡por Alah , que es atendible ...
... camino no era seguro; primero diré dos palabras sobre ello al escudero del cadernal; el resto es cosa mía, no os preocupéis.-¡Sed prudente, Athos - dijo Aramis.-Estad tranquilos - respondió Athos ...
... de asistirle, viéndole venir del ejército, ni quiso beber, sin embargo de que se ahogaba de sed, ni sentarse, estando fatigado; sino que, armado como estaba, puso la mano en una columna, y dejando ...
... derecha, segúncostumbre, y levantando la espada en vez de la fórmula habitual que dice:«os hago caballero; sed valiente, fiel y leal», dijo:––Sois valiente y leal; os hago caballero, señor conde ...
... negros a los que trataban peor que a bestias, golpeándolos, haciéndoles pasar hambre y sed, injuriándoles y obligándoles a caminar durante kilómetros sin descanso, hasta que caían exhaustos al suelo ...
... esposa santa quiso imprimir los suyos, a fuer de enamorada. Cárdenos, desunidos, la sed que te aquejaba de padecer, explican. ¡Oh, Piedad Soberana Cuando así te contemplo ...
... que se siente por dentro una iluminaci& 243;n, una inquietud no comparable a las dem& 225;s inquietudes, porque es la sed del esp& 237;ritu que quiere saciarse, una quemaz& 243;n que crece por grados ...
... Golondrinita -dijo el Príncipe-, ¿no te quedarás conmigo una noche y serás mi mensajera? ¡Tiene tanta sed el niño y tanta tristeza la madre -No creo que me agraden los niños -contestó la Golondrina ...
... y mis alhajas, reliquias de aquella antiguagrandeza (¡mas a qué no incitará los humanos pechos la execrable sed del oro ), resolviósea ejecutar la más civil bajeza que se ha oído. Estando solos ...
... 241;ados de sol, y a & 233;l le parec& 237;a andar a tientas en la penumbra del crep& 250;sculo. –Tengo sed, don Andr& 233;s. Entremos en cualquier sitio. El viejo le encaminaba al caf& 233; de Espa ...
... la mueve- segrega la elocuencia; y su saliva es más deseable que el zumo de las uvas; apaga la sed más abrasadora ¡Tal es su boca "¡Pero su seno ¡Bendito sea el Creador ¡Es una seducción ...
... . Comparado con muchos otros santos y muchos otros filósofos, era ávido en su aceptación de las Cosas, en su hambre y en su sed por las Cosas. Su especial tesis espiritual fue que realmente hay cosas ...
... y contemplaban las fortificaciones en ruinas que antaño defendieran la población contra los piratas. Apagaban su sed en los portales de la plaza principal.En aquella época se bebían vinos y licores ...
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