... en este mundo ni a un niño, ni a una flor, ni a un libro, esas tres obligaciones de las que Dios impone una por lo menos, según se asegura, a todo hombre un poco organizado al que digna dejar gozar ...
... 765la dama a quien pretendéis, ved si el fuego que tenéis con esta verdad se enfría. FELICIANOQue no sois mujer por Dios. INÉSAqueso habéis de dudar?, 770¿si lo fuera había de andar desta suerte ...
... . El soldado es el soldado, y el cura, el cura: cada cual en su profesi& 243;n... El soldado combatiendo sirve a Dios, y el cura rezando sirve al Rey. & 191;No le parece a usted?-S& 237;, se& 241;or ...
... veces a perderse en los abismos de sombra donde alienta el murciélago Satán; otras hacia el trono de Dios, cuya luz les cegara; pero allí, en aquel limbo moral, estaba la calma, el reposo. Las ideas ...
... & 160;recuerda el sarraceno de Zahara en el confín & 160;& 160;& 160;& 160;& 160;¡Oh Dios vertió en tu seno, deidad de Andalucía, & 160;la luz de sus miradas, la chispa divinal, & 160 ...
... cosas mundanas y de cómo hacerse más agradable a su mujer, pero el no casado se preocupa de las cosas de Dios y de cómo servirle mejor» , dice el apóstol San Pablo. Alexey Alejandrovich, que ahora ...
... debemos,porque, según nuestra fe,es para ganar aquélque atendemos.Aun& 91;1& 93; aquel hijo de Dios,para subirnos al cielodescendióa nacer acá entre nos,& 91;2& 93;y a vivir en este suelodo& 91 ...
... el pie en el estribo.-¡Se baja usted de grado o por fuerza ¡Lo mando yo -¿Usted? Y ¿quién es usted? ¡Vaya usted mucho con Dios -Que se baje usted a las buenas, o baja usted de cabeza...-¡Mire ...
... l rostro transfigurado por la muerte, en el que se expresaba la noble y sublime gravedad de la entrega a Dios.Junto al féretro estaban, de pie, el marido y los niños, en gran número; el más pequeño ...
... vino tendrá aquí. Revolviendo las coyundas está en la frente a los bueyes; ¡dichoso tú, que en las leyes de Dios tus intentos fundas ¡Oh, santísimo varón, que ya con milagros tales das ...
... , antes que el cieloamaneciese al mundo el primer día,nombrado —¡oh gran Felipe — Dios te habíapor rey universal de todo el suelo.Y así como esparció con tanto celoBautista la venida del Mesía ...
Jornada I& 160;031Pág. 031 de 110Amar por arte mayor Jornada ITirso de MolinaLOPEDios os guarde.ELVIRA¿Pues sin decirme más de eso 1050os partid? LOPE¿Qué he de deciros? ELVIRAEse os guarde, es algo ...
... rancho; pero de usted, ¡ingles ... quite allá... ¡Pues estamos lucidos ... Párvulo, quédate con Dios: estás perdonado. Orzó gobernando en demanda de la puerta; pero su carácter impetuoso lo trajo ...
... Galdós Foz Calanda, Abril.- ¡Ay qué pueblos, qué posadas, qué caballerías, qué arrieros de Dios y qué caminos del diablo He recorrido con mala sombra una de las comarcas más características ...
... es imposible que la España quede esclava si continúa ejercitando estas virtudes. Por último, que sólo Dios puede poner fin a estos males en pocos meses; pero que el mejor modo de resistirlos, duren ...
... largos que quisieran. Y allí estaba él. Presidente, Mediánez, y él, Arqueta, en Fomento o donde Dios fuera servido..., ¿por qué no? Así las categorías seguían respetándose, pues el presidente ...
... de CervantesDORLÁNEs el camino largo, y presurosa la gana de volver al suelo amigo. ¡A Dios quedad & 160;& 160;& 160; MANFREDOFortuna rigurosa, 625¿qué es esto? ¿Quién soy yo, o qué pasos ...
... ;cenlo los ni& 241;os muertos que est& 225;n en el cielo, y a los cuales permite Padre Dios, esta noche, que vengan a jugar con los Nacimientos.& 187;Todo aquello tuvo fin, y se sinti& 243; otra vez ...
... don de mi cuerpo:harás algo terrible”.Y tal como lo temía, mató a mi esposo;con eso no tenía nada que ver, ¡ante Dios ¡Silenciosa por treinta años en la cárcel Y la férrea reja de Jolietse abrió ...
... , perdido entre fachinales, abrigaba algún miserable puestero, encargado de cuidar a la de Dios es grande, rebaños bastante grandes de ovejas sarnosas, entre las cuales a ningún Tesco se le hubiera ...
1.989 palabras
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