... señoras, y la escuchaba. Al final de una estrofa calló y escuchó. Impensadamente subieron a su garganta unos sollozos cuya culpabilidad no sospechó siquiera.Miró a Natacha, que cantaba, y en su alma ...
... ; dos lágrimas, luego de esmaltar, sus pestañas, descendieron por los carrillos y resbalaron por la garganta para evaporarse en los pechos, cuyos encendidos botones abriría la maternidad. Andando ...
... tambi& 233;n a perder tu alma.Al decir esto se le extinguieron s& 250;bitamente las palabras en la garganta como si una mano invisible le hubiera agarrotado.-Me ahogo -murmur& 243; con sordo gru& 241 ...
... pensase que a Bruto le había sucedido lo mismo, siendo así que Bruto había vencido a César, dio su garganta, que se la cortase, a Pándaro, su liberto. En oyendo su muerte Antonio, se refiere que dijo ...
... tendido a la sombra del moral, Juan negábase a comer... Su tristeza le ponía un nudo en la garganta y no podía tragar bocado. Los amigos le consolaban, discurriendo las explicaciones más racionales ...
... abierto saut de lit, contra el abrasado contacto de aquella mano y de aquel pelo de seda en su garganta; contra el fuego de suspiros dolorosos de aquellos labios, que podría significar la pasión loca ...
... a una conmoci& 243;n el& 233;ctrica crisp& 243; todos sus nervios, y ahog& 243; un grito en su garganta, que trascendi& 243; en forma de espiraci& 243;n ronca y violenta.Los otros m& 233;dicos ...
... es el lis de tu blasón, el penacho de tu temperamento.Innumerables signos la revelan: cuando se te anuda la garganta al recordar la cicuta impuesta a Sócrates, la cruz izada para Cristo y la hoguera ...
... iba a sufrir la muerte, la madre le tomó en su regazo, le enredó con sus cabellos, juntó con la de él su garganta y a fuerza de quejas y lamentos le consiguió el perdón, y que fuera enviado otra vez ...
... corazón latía en el pecho hasta hacerla daño, y las palabras llenas de pasión salían de su garganta, tropezando en la infranqueable barrera de sus labios, había tenido el valor preciso para escribir ...
... almohada.»-¡Luz ¡Luz , ¡vida mía -llamé de nuevo con las angustias de todos los espantos en la garganta, acercando mi boca a su oído-. ¡Mira a tu madre ..., ¡dile que la oyes..., que la ves ...
... fuera, había de darle tan mala muerte y negro hado?15 Pues Odiseo, acertándole en la garganta, hirióle con la flecha y la punta asomó por la tierna cerviz. Desplomóse hacia atrás Antínoo, al recibir ...
... vuelta vio que la cara de su esposo cambiaba de color mientras se llevaba las manos a la garganta y exclamaba: «¡Dios mío, me han disparado » Inmediatamente después se escuchó un segundo disparo ...
... ser entendida por aquel bárbaro ciego. A las manos de Poli uniéronse pronto las de Fausto en la garganta y cogote de la loba infeliz, que agarrotada vomitó su propia lengua, y sus ojos se salieron ...
... el cielo negro. Los pájaros revolotean entre las ramas, caen hojas. Se anudan las palabras en la garganta, son demasiado usadas para decirlas. Vivimos una noche siempre nuestra. Me afianzo a tus manos ...
... un malicioso turco en turbante golpeaba a un veneciano e insultaba a la República, agarré de la garganta al perro circunciso y dile muerte... ¡así (Se da de puñaladas.)LUDOVICO.- ¡Oh, desenlace ...
... y que a todos ha de juzgamos& 187;. Algo quiso decir Ulibarri; pero la voz no le sal& 237;a de la garganta, y su intenci& 243;n no era poderosa para sacarla a los labios. Lo que decir quiso era breve ...
... caído prisioneros.Floridan se estremeció, quiso hablar, y no pudo; la voz se le anudó en la garganta, y pálido, azorado, con el frío del miedo, tiritando, fijó sus espantados ojos en su inexorable ...
... grandes? Pues sábete que las mujeres lo primero que se visten en despertándose es una cara, una garganta y unas manos, y luego las sayas. Todo cuanto ves en ellas es tienda y no natural. ¿Ves ...
... a la señora de la casa, vestida con elegante traje de raso negro, bastante guapa, luciendo su hermosa garganta por el cuadrado escote. Su pecho alto y redondo, su cintura delgada, sus anchas caderas ...
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