... , el país, la bandera -Ya lo creo, señor duque. Eso es lo primero. Por eso voy. Pero siento separarme de lo segundo. Y usted, señor duque, ¿a dónde bueno? -Phs... por de pronto a Biarritz, después ...
... . Tras la explosión de la bomba de Hiroshima se vio una inmensa bola de fuego -la temperatura subió en un segundo a 3.000 ºC- y el suelo tembló como si fuera un terremoto , levantándose vientos ...
... partir de aquel momento, el Gobierno británico cambió su política. Pero Hitler, que acababa de dar su segundo gran paso, no había hecho más que empezar.El rearme alemán llevaba un impulso cada vez ...
... trabajo de nacer cuando los franceses fueron echados de Milán y, por el azar de la cuna resultaba ser el segundo hijo de ese marqués del Dongo, el gran señor que ya conocéis por su amplia faz pálida ...
... hay ideas y personas para todos los gustos... Bien dice don Francisco Chico que el piso segundo es una república... Al tercero suelo subir yo, porque allí vive un primo mío, que me debe ochenta ...
nonePág. 051 de 156Las inquietudes de Shanti Andía - Libro segundoPío BarojaSe acercaba el momento de que la Bella Vizcaína tenía que partir. Yo fui a la fragata a dirigir la maniobray a ponerla en ...
... que ha desposado a un hombre en Francia y a otro en Inglaterra, una mujer que ha envenenado a su segundo marido y que ha intentado envenenarme a mí mismo.-¿Qué decís, señor? - exclamó el cardenal ...
... ,es fe que ha dado al mismo cielo espanto.& 160;& 160;& 160;Pasad, profeta, ese Jordán segundo;verán los reyes, que se ciegan tantoque estima el mar a quien destierra el mundo.Sonetos de Félix Lope ...
GALATEA Afuera el fuego, el lazo, el yelo y flecha de amor, que abrasa, aprieta, enfría y hiere; que tal llama mi alma no la quiere, ni queda de tal ñudo satisfecha. Consuma, ciña, ...
BLANCA Cual si estuviera en la arenosa Libia, o en la apartada Citia siempre helada, tal vez del frío temor me vi asaltada, y tal del fuego que jamás se entibia. Mas la esperanza, que ...
Tirsi, que comenzado había la triste y dolorosa elegía, fue el que la puso fin, sin que le pusiesen por un buen espacio a las lágrimas todos los que el lamentable canto escuchado habían. Mas, a esta ...
LUJÁN, que con la toga merescida honras el proprio y el ajeno suelo, & 160; y con tu dulce musa conoscida 155 subes tu fama hasta el más alto cielo, yo te daré después de muerto vida, ...
... ... Mi primer esposo fue inglés, hombre cortés y agradable, pero pronto lo perdí...; el segundo era francés, el cónsul francés en Guayaquil. ¡Éste no tenía precio, qué amabilidad, qué conversación ...
... -Antología de textos confucianos - I. El Filósofo Dijo -Antología de textos confucianos - II. El Ser y el No-Ser -Antología de textos confucianos - III. El Segundo Sabio -Confucio (Cronología)
... su esposa y su madre. A las dos habíahecho levantar a medianoche, sin decirles de qué se trataba.En el segundo iban el duque de Orleáns y su esposa, su hermana y elabate de la Riviere, favorito ...
... : o se enfrentaba con su madre, con su gobierno y con su pueblo, o expulsaba a Wagner. Optó por lo segundo.TriebschenEl sueño de Munich había durado menos de dos años. Expulsado de la que había ...
... manos a boca con el mancebo Vicentillo Sancho, del mismísimo Pozuelo de Calatrava, sobrino segundo de Don Bruno? «Pero, hijo, no te hubiera conocido... ¡Si estás hecho un hombracho No te he visto ...
... , y en 1992 el Cervantes. A su muerteera Directora emérita de la Academia Cubana de laLengua. Viuda de su segundo marido y gran amor, elperiodista tinerfeño Pablo Alvarez de Cañas, DulceMaría pasó ...
... n. Solamente les condeno a dos meses de c& 225;rcel, por no haber denunciado las visitas de Seudoquis al piso segundo de su misma casa.-& 161;Qu& 233; bober& 237;a -murmur& 243; por lo bajo Pipa& 243 ...
... a indigentes, en uno de los barrios más pobres de Moscú. Allí habitan una minúscula vivienda. Es el segundo de ocho hijos. Su infancia transcurre solitaria -debido a su enclave- y bajo la tiranía ...
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