... do le estaban esperando.A mí me ha parecido me convienequedarme con Garay, que va triunfando,y Zárate, que hambre siempre tiene.Rui Díaz Melgarejo, pues, allega al isla, y la comida les entrega ...
... de sueño y estudiando sin cesar en unas condiciones de vida presididas por el frío y hasta por el hambre.Gracias a una beca que consigue cuando ya tenía prácticamente hechas sus maletas para regresar ...
... palidece y tiembla como la hoja en el árbol. Quisiera huir, pero teme a su amo y además tiene hambre. Es voluptuoso, bruto, astuto a su manera, y pusilánime. A pesar de que teme a su amo como al fuego ...
... balbuciente hocico permitíaque del nido saliese,ni queso ni papel se agujeraba,por costumbre o por hambre que tuviese,ni poeta por todo el universose lamentó que le royesen verso,ni gorrión saltaba ...
... descanso, tener un buen fuego y los alimentos necesarios para no padecer hambre”, es cuando se dio cuenta por fin de que no sobre esto, sino sobre las cartas de Teofilacto Escolástico Simocatta ...
... Debilidad, hablando pronto... Y no es usted sola... yo hace rato que doy las boqueás de hambre. ¡Si debe de ser mediodía -Puede, puede que no se equivoque usted mucho. A estas horas suelen pasearse ...
... cincuenta mil hombres y otros en ochenta mil. La plaza sería rendida a fuego y hambre. Para que los habitantes de la metrópoli morisca no pudieran abastecerse de alimentos, fueron arrasadas las vegas ...
... a espanto de los vivos. A estos desperfectos exteriores se unieron, para mayor suplicio de Santiuste, el hambre que demacraba su rostro y el frío que mantenía sus manos en continuo temblor... Concluía ...
... Francia del siglo de oro. Brunetti, cuya verdadera vocación era la cirugía, pero que acosado por el hambre, había llegado a vivir del cornetín (un cornetín estridente que tocaba el pobre napolitano ...
... el momento de la reuni& 243;n de los dem& 225;s expedicionarios.Estos tra& 237;an fatiga y hambre, y la cena fue de hermanos. Se cantaron d& 233;cimas glosadas, se dio suelta al buen humor, y risas ...
... & 237;a dado alg& 250;n reparo de alimento, D. Beltr& 225;n no pod& 237;a tenerse de hambre y fatiga; los huesos le dol& 237;an como si se los hubieran machacado; pero m& 225;s que la molestia f& 237 ...
... vendiste a tu amigo, empezó Dios, no por castigarte, sino por advertirte. Caíste en la miseria y tuviste hambre, pasaste la mitad de tu vida codiciando lo que hubieras podido adquirir, y ya pensabas ...
... & 237;a a un encuentro con una banda de perros cimarrones, a los que se reuni& 243; acosado por el hambre y en cuya compa& 241;& 237;a se mantuvo por largo tiempo, hasta que husme& 243; la querencia ...
... casas de sus amos y tenían como principal tarea el trabajo duro. Cuando sobrevivían al hambre, las enfermedades y el hacinamiento de la travesía, eran exhibidos en las plazas públicas o desfilaban ...
... ;n mendigo y guerrillero. -Ven& 237;an con mal modo -continu& 243; este-; y me parece que rabiaban de hambre. Un oficial me dio un pedazo de pan... Yo ped& 237;a para el pobrecito ni& 241;o de pecho ...
... de oír su nombre. Basta decir que tú lo sabrás después.LISEO: ¿Entretiénese la hambre con saber qué ha de comer? TURÍN: Pues sábete que ha de ser... LISEO: ¡Presto TURÍN: ...tocino fiambre ...
... , henchidas de gozo, emprendieron el vuelo hacia las alturas, sin que la pequeña sintiera ya frío, hambre ni miedo. Estaban en la mansión de Dios Nuestro Señor.Pero en el ángulo de la casa, la fría ...
... se marcharon porque no les daban de comer.-Eso sí que es falso -dije, sin poderme contener-. ¡Hambre eso no lo ha habido allí nunca.-Perdone usted, querido -replicó muy serio-; me lo ha contado ...
... la muerte a quien las venda.ROMEO¿Y tú temes la muerte, estando tan escuálidoy cargado de penuria? El hambre está en tu cara;en tus ojos hundidos, la hiriente miseria;tu cuerpo lo visten indignos ...
... del Doctor Kafka -IX. 1912, Año Supremo -X. Once Años y Un Destino -XI. Un Artista del Hambre -Apéndice 1. Páginas Perdidas y Asesinato de los Testigos -Apéndice 2. La Actualidad de Kafka -Apéndice 3 ...
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