... había tenido algo que ver con Akulka? -volvió a interrumpir Cherevin.-Ya llegaremos a eso, ten paciencia. Mi padre había fallecido. Mi madre amasaba y cocía pan por cuenta de Ankudim, y esto nos daba ...
... ausencia pasa los tristes miserables días, llegado al flaco arrimo de paciencia, y no menos aquel qu’en sus porfías siente, cuando más arde, en su pastora 615 entrañas duras ...
... Fluctuaciones y Búqueda de NuevosEN 1488 Colón parecía a punto de perder la paciencia. La guerra contra los moros de Granada empezaba a antojársele demasiado larga para calmar su impaciencia ...
... que acababa de llegar, como si fuera él quien perdía en ello. Decíale Doña Leandra que tuviera paciencia y no fuese tan regañón, que a su edad no le haría provecho que se le encendiera la sangre ...
... tengo, que en harto poco es; pero de vos, señor, de vuestra prisión, ¿cómo hemos de hablar con paciencia? ¡Ah Yo recuerdo bien que prometisteis a la reina, mi señora, vengar vuestras afrentas ...
... con mucha resignación, porque la vieja le seguía haciendo señas de que callase. Por fin, para premiar su paciencia, se levantó la joven más hermosa y le dijo que se desnudase. Y mi hermano obedeció ...
... vomitando sangre, y tal vomitando el alma; éste gimiendo dolorosamente, y aquél gritando sin paciencia alguna.Esta mortandad y fracaso daba señales de haber sucedido sobremesa, porque los manjares ...
... estriva,& 160;& 160;& 160;& 160;un poeta mancebo y estudiante,dixo: «Cay, paciencia, que algun diasera la nuestra, mi valor mediante.& 160;& 160;& 160;& 160;»De nuevo afilaré la espada mia,(digo ...
... cosa estaba en un tris y los curas con el alma en un hilo... No había más remedio que tener paciencia y entretener de cualquier modo las pesadas horas, ya mirando los movimientos que con sus dedos ...
... -. ¡Y todo hubiera seguido en el mismo estado; nosotros calumniándolo y escarneciéndolo, y él sufriendo con paciencia nuestra injusticia, si Dios no se hubiera encargado de rehabilitarlo a mis ojos ...
... entre sus labios. Al ver la serenidad con que manejaba los naipes y la fruición con que apuraba la paciencia del adversario, nadie hubiera sospechado de que aquel hombre jugaba una partida que debía ...
... siempre,jamás ociosa, tenla más talento que toda la corte deParma junta. Pero carecía de paciencia y de impasibilidadpara tener éxito en las intrigas. Sin embargo, había llegado aseguir con pasión ...
... 243; su promesa de darme la soluci& 243;n en el d& 237;a fijado, recomend& 225;ndome la serenidad y paciencia... Mis comensales y las se& 241;oras que vinieron despu& 233;s picotearon de pol& 237;tica ...
... comer no les daba más que unas albóndigas, duras como piedra. Finalmente, los niños perdieron la paciencia y, esperando un domingo a que la bruja estuviese en la iglesia, huyeron.Terminada la función ...
... a lamentar el impulso que le había hecho ceder al deseo del califa. Y un día falto ya de paciencia, envió al califa una carta llena de desesperación, en la cual, entre otras cosas tristes, había ...
... & 243;nigo Figue-ras ya estaba en Roma y era inevitable el verlo. Escuchar& 237;a con paciencia su sermoneo, si es que en realidad se interesaba por este episodio de la vida moderna, menos conmovedor ...
... San José, valientemente, protegíala con su cuerpo. Pero la joven dama, brava también, no tuvo la paciencia de la espera. Rompió, y a pie lanzóse hacia el tumulto... Su compañero ató a una encina ...
... re los hombros.).- Y ahora, Tuppy, te diré que has perdido tu tipo y tu carácter. No pierdas tu paciencia: es lo único que tienes.LORD AUGUSTO.- Mira, querido; si yo no fuera el hombre más paciente ...
... , queréis sustituir el plato por un cuento. Decidlo, querido, franqueza tenemos para perdonaros y paciencia para escuchar vuestra historia, por fabulosa que parezca a primera vista.-Y yo os digo ...
... batallar, sino predicar: no sólo ha llegado la hora de la pelea, sino del ejemplo santo. Abnegación, paciencia, martirio. He aquí tres palabras mágicas que superan en eficacia a los más finos ...
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