... los prismas, de misteriosa condición y oficio no comprendido?... ¿y el infelicísimo eautepistológrafos?... ¿y el sesudo D. Basilio Andrés de la Caña a quien nunca humanos ojos vieron en otro estado ...
... en el municipio francés de Les Eyzies-de-Tayac (Dordogne). Fueron descubiertas en 1901 por Capitan, D. Peyrony y el abate Henri Breuil. Contienen grabados y pinturas rupestres correspondientes ...
... arquitectura civil de esta época en España. Cabe destacar las lonjas de Tortosa (1368-1373) y Castelló d’Empúries (s. XIV), que muestran todavía la primitiva disposición: naves abiertas, separadas ...
... siglos sin cuento. 2165CAURALI¿Este perro desvaría,o entra aquesto en el cuentode la fiesta deste día?D. FERNANDOCalla, Tristán, y ten cuenta,porque ya se representa 2170el coloquio.SACRISTANSí haré ...
Los tres mosqueterosEl albergue del Colombier Rougede Alejandro Dumas (padre) Apenas llegado al campamento, el rey, que tenía tanta prisa por encontrarse frente al enemigo y que, con mejor derecho ...
El jugadorCapítulo 13de Fiódor Dostoyevski He estado casi un mes sin continuar estas memorias, empezadas bajo la influencia de impresiones, desordenadas, pero fuertes.La catástrofe, cuya inminencia ...
Al día siguiente Pedro, sin premeditada intencion, y aun sin notarlo, salió más temprano que otras tardes para ir a su acostumbrado paseo. Mas a pesar de eso, cuando llegó, ya estaba aquella extraña ...
... . Los astrónomos explicaron primeramente tan débil brillo por la baja temperatura de la superficie d esta estrella; la consideraron como una estrella en enfriamiento cuya superficie está cubierta ...
... de los escritores españoles del siglo XIX - Tomo IIde Manuel Ovilo y Otero MESTRE Y MARZAL (D. CARLOS), MÉDICO. Nació en la ciudad de Valencia el 30 de agosto de 1818. Es médico-director de los Baños ...
Capítulo IX& 160;10Pág. 10 de 27Del frío al fuegoFelipe TrigoTodo pasó. Estamos leyendo con la misma indolencia de siesta bochornosa que antes de morirse nadie y de haber estado a punto de hundirnos ...
... , será sencillamente porque no quiere.En tiempos de revuelta española, dijo alguien a D. Nicolás Estévanez: -Hace falta aquí un dictador. ¿Quiere usted serlo?-No; porque soy sinceramente republicano ...
Juvenilia - Capítulo 3de Miguel Cané He dicho ya que mis primeros días de colegio fueron de desolación para mi alma. La tristeza no me abandonaba y las repetidas visitas de mi madre, a la que rogaba ...
... españoles del siglo XIX - Tomo IIde Manuel Ovilo y Otero ORTIZ DE PINEDO (D. MANUEL), PUBLICISTA. Es redactor del periódico político la Discusión y del titulado la América. Ha dado al teatro ...
... escribir algo acerca de este publicista francés, que es uno de los más notables entre los jóvenes. D. Juan Valera anunciaba, no ha mucho, en uno de sus excelentes artículos de la Revista de España ...
... siempre, y para cuanto guste, suyo afectísimo S. S. Q. B. S. M.» Esto, dictado por D. Apolinar, lo escribía su amanuense con la más desastrosa ortografía, sobre un ancho papel verdoso sin membretes ...
... aba convencido, como se ve en este poema, y más concretamente en su oda Le Dolci Rime d’Amore, de que todos nacemos buenos, con germen divino en nosotros mismos, y, por tanto, en potencia virtuosos ...
... ama haciendo de reina de Mongolia en la representaci& 243;n de la comedia titulada Perderlo todo en un d& 237;a por un ciego y loco amor, y falso Czar de Moscovia.Ayudarla en el estudio de sus papeles ...
Los tres mosqueterosUna cena de procuradorde Alejandro Dumas (padre) Mientras tanto, el duelo en el que Porthos había jugado un papel tan brillante no le había hecho olvidar la cena a la que le había ...
4.776 palabras
Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar |
Más información