Pablo Neruda.«En estos momentos pienso en las calles de mi infancia, en el invierno del Sur de América, jardines de lilas de la Araucania, en la primera María que tuve en los brazos, en el barro de ...
Introducción«HENOS aquí, después de tantos trabajos, en la sagrada patria de la Hélade ¡Salud, olímpico Zeus ¡Y Apolo ¡Y Afrodita Preparaos, oh musas, a bailar de nuevo, porque nuestros cantos ...
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(Del latín angelus, mensajero.) En alemán, engel; en francés, ange; en inglés, angel; en italiano, angelo. m. Rel. Personificación y concreción momentánea de alguna fuerza experimentada por el hombre ...
Capítulo VIII& 160;09Pág. 09 de 31El comendador MendozaJuan ValeraDoña Antonia amaneció con un tremendo jaquecazo, enfermedad a que era muy propensa. Tuvo, pues, que guardar cama y no pudo acompañar ...
Descenso de la temperatura por debajo de 0 0C, que provoca la congelación del agua, cuando es constante. Se produce el fenómeno cuando se hiela parte del agua de la superficie terrestre y desciende ...
El Señor de Bembibre Capítulo XIIde Enrique Gil y Carrasco Extraño parecerá tal vez a nuestros lectores que tan a punto estuviese el abad de Carracedo para destruir los planes de felicidad de don ...
Don Gonzalo González de la Gonzalera-XX: Los relámpagosde José María de Pereda Unos días después entró don Frutos en casa de don Román, algo caído de cerviz y mustio de semblante. Don Román se paseaba ...
Ismael& 160;: 55de Eduardo Acevedo Díaz Desde sus claustros de San Francisco, en donde un prosegu& 237;an sus tertulias cada vez m& 225;s animadas a medida que aumentaban los ardores pol& 237;ticos ...
Al día siguiente Pedro, sin premeditada intencion, y aun sin notarlo, salió más temprano que otras tardes para ir a su acostumbrado paseo. Mas a pesar de eso, cuando llegó, ya estaba aquella extraña ...
Por qué las estrellas parecen "estrelladas"Mirando las estrellas a simple vista, las vemos rodeadas de rayos de luz. La causa de este aspecto radiante de las estrellas está en nuestros ojos, en la ...
La Montálvez-Parte I: Capítulo XVIIde José María de Pereda Según lo convenido con mi madre, al otro día, en cuanto el banquero llegó, salí yo sola a recibirle. En la penumbra del salón, donde ...
... ;Al trasponer tus peñas, vieja Orduña, sobre el fresco verdor de los maïces los amarillos trigos que raïces prenden en la llanada de la Armuña llenaban mi memoria, la que acuña los pasos venturosos é ...
Capítulo XXIX& 160;29Pág. 29 de 49Sancho SaldañaJosé de EsproncedaVelada en nubes la celeste cumbretodo era noche, luto y tempestad,sólo a tu rostro de divina lumbrevaga aureola daba majestad,ANTONIO ...
Ivanhoede Walter Scott «Sube, valiente soldado,a lo alto de aquesa almena;mira y dinos cómo vael reñir de la pelea.»SCHILLER: La doncella de Orleans.Los momentos de peligro suelen ser también momentos ...
Del sentimiento trágico de la vidaIEl hombre de carne y huesode Miguel de Unamuno Homo sum: nihil humani a me alienum puto, dijo el cómico latino. Y yo diría más bien, nullum hominem a me alienum puto ...
El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. HydeCapítulo IX: El Relato del doctor Lanyonde Robert Louis Stevenson El nueve de enero, hace cuatro días, recibí con la correspondencia de la tarde una carta ...
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