... llegar al sillón... al sillón que allí veo... Así, así... ya estoy a mi gusto... Aquí me desmayo... aquí me desvanezco... Por Dios, Isaac, mi buen Isaac, abaníqueme usted, deme aire; pero fuerte ...
... entre la inmortalidad y la muerte del espíritu es una necedad, según voy sospechando.- 20 de Octubre. ¡Dios mío ¡Si seré yo el Estrada de la filosofía ¡Ahora miro mi sistema de la muerte ...
... en el muérgano, en aquesas mánicas descampa un golpe de adre que arrempuja... JUSEPA. - ¡Válgame Dios, que trenes los de la mar Uyí que en no sé qué mar se fue al jondo un barco cargao de dinero ...
... rozar mi hombro con la propia mano con que me pedía silencio poco antes.–Pero, Elena, ¿qué es esto? ¡Dios mío ¿Vive, señora? ¡Y así toda la vida –gritó, entre enfadada y risueña, la tía ...
... su gusto; pero no me negar& 225; usted que existe contra m& 237; una hostilidad declarada. Y si yo llegase a amarle, & 161;Dios m& 237;o , & 191;qu& 233; dir& 237;an entonces de m& 237;? Creer& 237 ...
... color (1918) , Manhattan negro (1930) , etc. Su mejor poesía se encuentra en Los trombones de Dios (1927). Sus dos antologías de «espirituales» (1925-1926) contribuyeron a la difusión del folclore ...
... de tal deseo goces.Entonces pude ver cuál estropiciode él hicieron las fangosas gentes,que aún a Dios alabo y agradezco.Todos gritaban: "¡Ea Felipe Argenti ";y el florentino espíritu irritableél ...
... vara de alcalde. CLEMENCIANo la ha alcançado de valde: que su salmorejo tiene. 170Hermano Clemente, a Dios. CLEMENTE¿Pues cómo quedamos?CLEMENCIABien. Benita, si quieres, ven. BENITASi, pues venimos ...
... que se anima al restalle de la tralla y ¡hay que morir exclama. Pon tu partey la de Dios espera, que abomina del que cede. Tu ensangrentada huella por los mortales campos encamina hacia el fulgor ...
... el mar, en la tierra y en los aires; hacerla con todas nuestras fuerzas y con toda. la energía que Dios nos concederá; hacerla contra una tiranía tan monstruosa que el sombrío y lamentable catálogo ...
... Amalia, los que rodean a Amalia, yo, quizá también la señora Dupasquier y Florencia.»¡Cómo conjurar, Dios mío, esta tormenta » -exclamaba Daniel en lo interior de su alma, inquieto y con miedo ...
... que ir a informar de la marcha del Príncipe.–¿Ha terminado todo? ¿Se ha ido?–Sí, gracias a Dios. No sabes lo molesto que me ha sido. –¿Por qué? Al fin y al cabo llevabais la vida habitual ...
... 1969), Los inquilinos (1971), El sombrero de Rembrandt (1973), Las vidas de Dubin (1979) y La gracia de Dios (1981) son algunas de sus obras más significativas. En 1984 publicó The Collected Stories ...
... 237;a, s& 237; -respond& 237;a Fernando, no tan alegre como debiera-: ya veo, ya veo que Dios os ha dado muchos, much& 237;simos bienes; pero con ser tantos, no llegan a lo que vosotras merec& 233;is ...
... copla, más o menos chistosa, por ejemplo:A la orilla de un barrancodos negros cantando están:¡Dios mío ¡Quién fuera blanco...aunque fuese catalán A los carcamanes, bachichas, «mangiapolenta ...
... malicia que el encanto? Pero, pues así es, yo le quiero probar evidentemente como no va encantado. Si no, dígame, así Dios le saque desta tormenta, y así se vea en los brazos de mi señora Dulcinea ...
... como un silguero que donde interviniesen dueñas no podía suceder cosa buena. ¡Válame Dios, y qué mal estaba con ellas el tal boticario De lo que yo saco que, pues todas las dueñas son enfadosas e ...
Sus mejores versos Dos milagrosde Federico Balart Al hacer, niña, tus ojos,dos milagros hizo Dios:de dos gotas de tiniebla,dos rayos de luz sacó.Sus mejores versos de Vital Aza Preludio -Primer ...
... , junto con el dolor, acucia el paso. & 160;(Vase el EMBAJADOR.)& 160;& 160; DUQUE¡Parte con Dios, y lleva mi deshonra a los oídos de mi yerno honrados, yerno con quien pensé aumentar la honra 160que ...
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