... , que durante tantos siglos había dominado el mundo, produjo, indudablemente, una emoción profunda en las conciencias. Los intelectuales se interrogaron a sí mismos y muchos de ellos invocaron causas ...
... tocó su vez a Athosde observarle a hurtadillas.Artagnan leyó la carta sin ninguna emoción externa; cuando concluyómovió ligeramente la cabeza, y dijo:––Aquí tenéis lo que es el servicio ...
... anhelar de las palomas cuando alguien las coge y las aprieta, se dirigió al bruto, y le dijo tartamudeando de emoción: -A ver si dejas en pas al señó Neira... Bastante abroncao estará el pobre hombre ...
... del navío que partía. Esta mujer estaba cubierta con un velo.Montecristo la siguió con los ojos con tal emoción que Morrel habría visto fácilmente si no hubiese tenido los ojos fijos sobre el navío ...
... y ruegos, que, por fin Isidora no quiso ser esquiva con él en tanto grado, y se fueron juntos. Por otra parte, la misma emoción que temía la solicitaba con fuerza misteriosa. Hay en toda alma ...
Los Apostólicos& 160;: 33de Benito Pérez Galdós -& 161;Chit& 243;n, chit& 243;n por todos los santos del cielo -dijo D. Benigno poni& 233;ndole la mano en la boca para hacerle callar.El h& 233;roe ...
... joven, con gafitas, elegante, tímido) respondía a un diseño prefabricado, con escasa naturalidad y ninguna emoción.Harold Lloyd se incorporó al cine en 1916, atraído sin duda por el éxito de Chariot e ...
... y convencimiento.–Te doy las gracias con toda mi alma –exclamó Hendon con un fervor que revelaba su emoción.Y el rey añadió con la misma sencillez admirable:–¿Dudas tú de mí?Invadió a Hendon ...
... a míster Root a bordo del Charleston sagrado; mas mi convalecencia duró poco. ¿Qué digo? Mi emoción, mi entusiasmo y mi recuerdo amigo, y el banquete de La Nación, que fue estupendo, y mis viejas ...
España sin Rey& 160;: 7de Benito Pérez Galdós El primer encuentro del caballero de Jerusal& 233;n, despu& 233;s del ojeo nocturno que referido queda, fue en la Plaza de las Cortes, volviendo el uno de ...
... . De pronto exclamó:-¿Y Luciano?-Aquí estoy, contestó este acercándose con pasos quedos y reprimiendo su emoción.-Cedo el puesto, dijo Bibiana apartándose de la cabecera de la cama.-¡Bibiana, hija ...
... ,D. Gerardo tuvo que llevarse el pañuelo a los ojos, y el buen Ibero, fácil a la emoción, hacía visajes, pestañeaba, componía su rostro para que no vieran llorar a un soldado rudo, ni flaquear ...
... minutos,pasaban y seguíamos callados.Nadie decía nada, pero todospensábamos lo mismo. Como siempreque la conmueve una emoción penosa,mamá disimulaba ingenuamentequeriendo aparecer tranquila. ¡Pobre ...
Capítulo XXXII& 160;33Pág. 33 de 34Dos mujeres Gertrudis Gómez de AvellanedaLa emoción de Carlos al separarse de la condesa se aumentaba a medida que iba acercándose a Luisa. Sentíase oprimido, tenía ...
... de juego aquella memorable jornada que modificó totalmente el rumbo de mi vida. Avergonzado y lleno de emoción pedí perdón al anciano, por quien sentía un afecto verdadero, y le juré que en adelante ...
... el infierno que debió atormentar no sólo a Felipe, sino a todos los castellanos de entonces. La emoción violenta que reflejan las figuras arrodilladas, como en actitud de arrepentimiento, es la idea ...
... compasión y pena; pero como no había manera de esquivar la respuesta, dijo una de ellas, con voz desgarrada por la emoción:–¡Oh Nos destrozas el corazón, alma cándida. Dios nos ayudará a soportar ...
... como lo pintaban... llegó a decirse Genaro reaccionando en sus adentros, vuelto ya de la emoción violenta que acababa de dominarlo. Y, alentado por las facilidades que se le ofrecían, en presencia ...
... madre, ausente, poco bueno tenía que decir ¡ay pues ella fue quien la llevó a la desgracia. Con emoción y vergüenza me suplicó que no la obligase a dar más pormenores de su deshonor y de la maldad ...
... parido. Los hijos son un signo de prestigio si son varones.La etiqueta ha reprimido toda emoción espontánea: no se puede llorar la muerte del padre más tiempo o menos del prescrito: veintisiete meses ...
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