nonePág. 75 de 158Cañas y BarroVicente Blasco IbáñezEl vagabundo parecía enternecido por la copa que le había pagado Tonet. La calma del puerto, interrumpida a ratos por el martilleo de los calafates ...
... ingleses; se entendió con la sobrina deBeracochea, formaron una sociedad y comenzaron a ganar dinero.De un vagabundo de mala fama, Machín se convirtió en hombre todopoderoso; daba trabajo, favorecíaa ...
... causa de mil accidentes. Incluso los millonarios no tenían asegurado que su nieto no se convirtiese en un vagabundo sin hogar o su nieta se viese forzada a una vida de vergüenza. Bajo el nuevo sistema ...
... candente colaaugurando catástrofes al mundo,en su órbita encerrado le venera:y, si de ella se aparta vagabundo,Dios, con su marlo que en la sombra oculta,lo ataja en la mitad de su carrera,lo prende ...
... muchacho alzó los hombros para expresarse que no tenía idea de la patria. -Éste es un vagabundo de esos que no se sabe quién les ha parido, y no parece sino que salen de las piedras -dijo la señora ...
... rey o del señor feudal mandarlo... bien, pase; pero que cualquier descamisado vagabundo venga a pegar papeles en la puerta del presbiterio... eso, eso es casi un sacrilegio ... Por menos han llevado ...
... compras para la cena había oído referir ciertas cosas en distintos sitios. Se hablaba de un vagabundo de mala catadura; se decía que había llegado un hombre sospechoso, que debía estar en alguna parte ...
... & 237;a desde luego su atribulado coraz& 243;n al hermano querido, al aventurero, al vagabundo, al revolucionario, al amante de la Samaritana; y por no poner l& 237;mites a su desbordada indulgencia ...
... que se dirigía únicamente a su vecino.-Pues bien, hermano mío, comenzaron enviándome de mi país por vagabundo -dijo Luka, interrumpiendo la costura.-¿Hace mucho tiempo de eso? -preguntó Kobilin ...
... .Wallace Stevens: Harmonium.David H. Lawrence: Pájaros, bestias y flores.Joseph Conrad: El vagabundo de las islas.Ernest Hemingway: En nuestro tiempo.André Gide: Dostoievski.Paul Valéry. El arquitecto ...
... us monarquías - III. El adiós a la infancia - IV. Primeros pasos en Italia - V. El Rousseau vagabundo - VI. El Siglo de las Luces - VII. Una familia para Rousseau - VIII. Un pensador solitario ...
... fuerte, que no se localizaba en parte alguna, que dominaba todo el organismo, como resultado de su juventud agitada de vagabundo y de la vida perezosa y sedentaria que llevaba ahora. Debía agitarse ...
... Martín; y Martín le ganaba la partida sacando a la Ignacia de su alcance y enamorando a su hermana.¡Un vagabundo, un ladrón, se la había jugado a él, a un hidalgo ricoheredero de una casa solariega ...
... de nacimiento de una nación - III. Un niño voluntarioso en un ambiente pu ritano - IV. Vagabundo en busca de trabajo - V. El escultor de su personalidad - VI. La profunda filosofía de lo vulgar ...
... senderoque él abrirá desde la cima al mundo,ha de bajar un día el Mensajero.Lo anunciarán un aire vagabundo,un divino pavor de corazones,un callar enigmático y profundo.Le seguirán rebaños de leones ...
... asegurando entre berridos que estaba muerto. Le daban el último vino del pellejo para animarlo, y el vagabundo, satisfecho del remedio, juraba que estaba pasado de parte a parte y no podía levantarse ...
... resguardado por tablas negras.Tonet no había visto a Sangonera en muchos días, y el vagabundo le contó sus penas.Nada tenia que hacer en el Palmar. Neleta la de Cañamel, una orgullosa que olvidaba ...
... apuestos vestidos de colores como p& 225;jaros vistosos, no se hubiera fijado en un vagabundo envejecido por la miseria, feo y enfermo. Nos conocemos porque somos desgraciados. La miseria nos permite ...
... us monarquías - III. El adiós a la infancia - IV. Primeros pasos en Italia - V. El Rousseau vagabundo - VI. El Siglo de las Luces - VII. Una familia para Rousseau - VIII. Un pensador solitario ...
... s& 243;lo quedaba la compra y venta, la red tendida para recoger gangas, todo el g& 233;nero vagabundo que siempre fluct& 250;a en grandes poblaciones; quedaban tambi& 233;n valiosos pr& 233;stamos ...
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